Andrés Ramírez Blanco, nacido en Bornos (Cádiz), es licenciado en Filología Hispánica por la Universidad de Cádiz. Disfrutó de una beca Erasmus en la Universidad Van Ámsterdam y de una beca Séneca en la Universidad de Granada.
Consigue aprobar algunas asignaturas de la Licenciatura de LADE y Derecho en la Universidad de Córdoba y tras un largo periplo como recepcionista de hotel, supera los consiguientes exámenes para entrar en la bolsa de interinos de la Consejería de Justicia de Andalucía, trabajando como Auxilio Judicial en Valverde del Camino (Huelva).
Trabajo que deja de forma voluntaria para enrolarse como profesor de Secundaria en el I.E.S. Tolosa de la Línea de la Concepción, con un destino de vacante para todo el curso. En la actualidad trabaja en el Juzgado de Paz de Fuente Palmera. Por otro lado, es componente del Club de Lectura de la Colonia de Fuente Palmera.
Todo ello no tendría sentido si no dijera que procede de una familia humilde que le brindó la oportunidad de conocer el mundo rural, trabajando desde los seis años cuidando vacas y sembrando la huerta familiar. Durante la carrera trabajó durante cuatro veranos consecutivos en la construcción, para poder sufragar los gastos que llevaba aparejado estudiar en la Universidad.
Y durante toda su vida ha estado y sigue estando colaborando con los negocios familiares, aunque ahora desde la distancia.
Andrés ha querido dedicar unas primeras palabras a l@s lectores de Fuente Palmera Información:
Hablar de mí puedo os puedo asegurar que puede tratarse de una de las tareas más ingratas e incómodas a la que me haya podido enfrentar. Estoy seguro de haber suspendido y de no aceptarme en muchas de mis facetas, pero mi gran ilusión es seguir mejorando como persona y tratar de sacar lo mejor de mí mismo.
Creo que sustento bajo dos férreos pilares el desarrollo de mi vida: mis seres queridos, familia y amigos; y las letras, con las letras me refiero a leer mucho y escribir aquello que me incomoda o necesito sacar fuera. Creo ser una persona que sabe disfrutar y alcanzar lo mejor que la vida tiene reservado para ella. Muchas veces pienso en los grandes valores que nos otorgan el esfuerzo, el sacrificio, la perseverancia y pensar de forma colectiva.
De la misma forma pienso que vale de bien poco aplicar la inteligencia en solamente obtener la recompensa personal, para ello hay un dicho, “para llegar rápido, ve solo; para llegar lejos, ve acompañado”. Es por ello, que creo que cada persona tiene algo maravilloso que atesora dentro de sí misma, en base a todo lo aprendido ante la vida, que bien pudiera ser de utilidad para todos los demás.
En este nuevo proyecto compartido y gracias a la oportunidad que nos brinda el amigo Evaristo a través de esta ventana a la realidad, vamos a tratar de aprender y de mostrar, todo de forma conjunta gracias a las palabras y enseñanzas de las personas que tengan a bien participar en contarnos sus vivencias y enseñarnos ese tesoro, con el que la vida los ha premiado.
Amigos y amigas, estáis todos invitados. Podemos vernos por aquí, en esta nueva sección, «Sin anestesia».