La jornada fue inaugurada por el alcalde de Fuente Palmera, Francisco Javier Ruiz, que agradeció la asistencia de los casi 80 padres, madres y algunos jóvenes para informarse de una problemática que va en auge, de sus consecuencias y, lo que es más importante, de las pautas y recursos que se le puedan ofrecer a las familias. En la presentación también intervino Pepi Moyano, educadora social del Área de Servicios Sociales del Ayuntamiento de Fuente Palmera, que anunció el proyecto de crear una escuela de padres en el instituto en la que sean las familias las que propongan los temas a tratar.
En cuanto a la ponencia del doctor Casas, esta se centró en la relación de los adolescentes y jóvenes con las redes sociales y en cúales son los riesgos a los que están expuestos. Si bien no se profundizó en los consejos y recomendaciones para las familias -lo cual tendría que ser objeto de otra conferencia más específica-, al menos quedó claro que la educación a edades tempranas desde el ámbito familiar puede ser clave para evitar que nuestros hij@s acaben dominados por internet y las redes sociales.
José Antonio Casas dió algunos datos muy significativos, como que el 90% de los jóvenes hasta 14 años ya usa las redes sociales, porcentaje que aumenta hasta el 95% en los jóvenes entre 14 y 17 años. Queda así constatada la importancia que para los jóvenes y adolescentes tienen las redes sociales en su vida diaria. Para muchos de ellos, tener un móvil y conexión wifi se ha convertido en algo imprescindible, lo que choca paradójicamente con la prohibición por ley de que los menores de 14 años no pueden tener un perfil en una red social y que los móviles no pueden usarse en los centros educativos. Son sólo algunos ejemplos de que la legislación está a años luz de la realidad y de todo lo que rodea a internet y las redes sociales.
Para los jóvenes, hoy en día se puede hacer todo con un móvil, desde escribir, dibujar, jugar, hablar, comprar, ver a otras personas, etc. Además, suele ser el regalo estrella, junto a las tablet, de las comuniones.
Casas enumeró otra serie de datos extraídos de la Encuesta Generaciones Interactivas en España realizada a 6.000 escolares de entre 10 y 18 años. De ellos, el 80% usa las redes sociales(incluido el Whatsapp) para comunicarse; el 76% conoce gente nueva; el 96% comparte fotos y vídeos; el 74% se divierte(juegos en red, radio y televisión digital); y el 12% consume(compras on line).
Por otra parte, las estadísticas reflejan que el 70% de los jóvenes aprenden solos a usar internet, mientras que el 30% restante reciben la ayuda de padres, madres, hermanos, profesores o amigos. Con este dato, no es de extrañar que la brecha digital entre menores y mayores siga en aumento. Otros datos relevantes son los siguientes: entre el 15 y el 20% del tiempo de conexión a internet de un joven es para hacer las tareas del colegio o instituto; el 70% de las fotos que se suben al facebook son de fiestas o tienen relación con estas; el 93% de los internautas españoles acceden a las redes sociales.
En resumen, internet y las redes sociales se han convertido en un lugar importante para tod@s y por eso debemos aprender cómo comportarnos y hacer un buen uso de ellas. Además de relacionarnos y comunicarnos, nos permiten y nos ofrecen muchas más posibilidades en sentido positivo: encontrar información para los deberes y trabajos; aclarar dudas sobre cómo resolver tareas o problemas; informarnos de lo que pasa a nuestro alrededor; aprender de lo que dicen o suben a la red; jugar con nuestros compañeros y amigos; compartir nuestras cosas con personas que no podemos ver; ayudar a personas que lo necesitan; visitar cualquier lugar del mundo; etc.
Pero también pueden jugarnos malas pasadas, siendo los riesgos numerosos y con fatales consecuencias. He aquí una de las claves de la problemática: la mayoría de los jóvenes no son conscientes del riesgo ante el que se hayan expuestos. Algunos de los peligros son:
– Pérdida de privacidad: la información puede ser utilizada de forma mal intencionada.
– Rapidez en la difusión.
– Los ataques pueden ser anónimos.
– No existe control sobre la información personal.
– Adicción a los juegos on line.
– Cyberbullying: uso de medios digitales para acosar a un individuo o grupo de individuos, mediante ataques personales, divulgación de información confidencial o falsa en otros medios.
– Grooming: personas desconocidas que se ganan nuestra confianza para dañarnos. Es el caso de los pederastas que mediante engaños se ganan la confianza de los menores para conseguir concesiones sexuales.
– Sexting: difusión de imágenes o vídeos privados sin consentimiento.
Entre los consejos para evitar todo lo anterior destacan:
– Dedica un rato a configurar tu seguridad en las redes sociales. No des contraseñas a nadie.
– Protege tu información y privacidad. Recuerda que entre los contactos tenemos distintos tipos de amigos. No hables con desconocidos.
– Lee lo que aceptas en una red social.
– Aclara el uso que quieres que hagan de tu información o imágenes.
– Haz lo que te gustaría que te hicieran y no hagas lo que no te agradaría. Respeta la intimidad y la privacidad de los otros.
– Si tienes dudas, no te calles, habla con un adulto o pide ayuda.
– No pierdas el tiempo: usa internet, pero no te dejes atrapar por él.
Por último, entre las preguntas y opiniones que comentaron algunos de los asistentes, destacamos la propuesta de una madre de realizar este tipo de charlas a los propios hij@s y jóvenes, ya que puede tener más incidencia para ellos que se lo diga un profesional en vez de las familias.
En definitiva, el aprendizaje de lo que son las redes sociales, sus oportunidades y sus riesgos, es una tarea que debe de incorporarse a las prácticas educativas de familia y escuela. Desgraciadamente, algunos problemas sociales están empezando a estar muy presentes en estos entornos virtuales y se han convertido en un verdadero peligro para la convivencia escolar y juvenil. Tod@s, familias, docentes y alumn@s, debemos aprender a convivir en la red, construir una buena ciberconvivencia, ayudando a los más jóvenes a protegerse y proteger a los demás de los riesgos de las redes sociales.
