Con la asistencia de más de 70 personas, el alcalde colono, Francisco Javier Ruiz, presentó a los cuatro componentes de la mesa, tres de los cuales han estado como voluntarios en Grecia salvando vidas y haciendo un poco más llevadero el drama que viven todos los ciudadanos sirios y de otros países que están huyendo del horror de la guerra.
Abrió la conferencia Carlos Arce, profesor de Derecho y delegado y coordinador del área de inmigración de la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía(APDHA) en Córdoba. En su exposición, criticó que se esté vendiendo como un gran éxito el acuerdo UE-Turquía a pesar de que ha bajado un 90% la entrada de inmigrantes desde Turquía a Lesbos, «porque lo que está pasando es que los turcos están limpiando sus costas y obligando a los refugiados a buscar otras vías alternativas más peligrosas; de hecho, en estos primeros seis meses de 2016, que se sepa, han muerto en el Mediterráneo 3.570 personas, una cifra que está muy lejos de la realidad porque no se sabe la cantidad real de personas desaparecidas y/o fallecidas; aún asi, es un número muy similar al total que murieron en el mar en 2015». Además, «Turquía es un estado con pocas garantías para gestinar las fronteras, ya que muchas de sus regiones llevan en guerra civil bastantes años y reciben a tiros a los inmigrantes».
Arce criticó también al gobierno español por seguir en la práctica vulnerando los derechos humanos con su política de fronteras a pesar de haber modificado la Ley de Extranjería. «Y si ha disminuido la entrada por Ceuta y Melilla es porque el ejército marroquí está limpiando la zona de inmigrantes y ha construido otra valla y un foso para impedírsela», subrayó el representante de la APDHA.
Uno de los voluntarios en Lesbos, Juan Hidalgo, perteneciente a la ONG Unadykum y que estuvo en la isla griega en febrero, afirmó que «quienes debemos de poner pies en pared ante la mayor crisis migratoria desde la Segunda Guerra Mundial somos nosotros, los ciudadanos, los voluntarios independientes, las oenegés pequeñas, etc., porque los gobernantes de Bruselas no van a hacer nada. La UE, en vez de salvar vidas, manda barcos de guerra y personal militar, demostrando una falta de humanidad acuciante, con devoluciones en caliente a Turquía. Además, el 99% de los países miembros incumplen la legislación internacional de la IV Convención de Ginebra, tratado que se refiere a la protección debida a las personas civiles en tiempo de guerra mediante la concesión de asilo. Es significativo que sean los países limítrofes a Siria, estando en peores situaciones que los de la UE, los que acojan a más personas».
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Hidalgo animó a Ayuntamientos como el de Fuente Palmera a aprobar mociones institucionales, realizar proyectos de solidaridad, animar a vecinos a que vayan a ayudar, montar y sufragar un hospital de campaña, etc. En este sentido, ciudades como Córdoba ya están tomando iniciativas para que el apoyo al colectivo de los refugiados no sea sólo testimonial, sino que pase a la acción. Así, a través de la Oficina de Cooperación Internacional al Desarrollo de la Diputación se ha creado la Plataforma ‘Córdoba Ciudad Refugio’, orientada para la acogida efectiva y real de refugiados.
A continuación intervino Roberto, un cordobés que llegó de Grecia el día de antes de esta conferencia y que ha participado en un bonito proyecto de entretenimiento y animación junto a otras nueve personas. Este grupo ha llevado a cabo un espectáculo de circo, con pasacalles y diversas actividades de ocio, que ha hecho olvidar el sufrimiento por un ratito a niños y adultos. Recorrieron varios campamentos en la zona de Tesalónica y su intención era haber llegado al archiconocido Idomeni, pero fue desmantelado antes. Roberto narró como el ejército entró en el campamento una noche a la una de la madrugada para echar a voluntarios, periodistas, etc.; varias horas después expulsó a los inmigrantes y finalmente entraron unas excavadoras que arrasaron con todo lo que había allí de las oenegés, etc.
Por último, participó en la charla Joaquín Higueras, un bombero cordobés que trabaja en el Cuerpo de Bomberos de Fuengirola y que estuvo en Lesbos del 4 al 19 de marzo. Joaquín realizó una labor humanitaria encomiable y digna de elogio, salvando a multitud de personas cuya embarcación naufragaba en su intento de llegar a la costa griega. Joaquín comentó el denigrante control que ejercen las mafias en el tráfico de personas y que muchas grandes oenegés practican el llamado turismo humanitario, consistente en mandar a sus representantes para únicamente coger a un niño y hacerse la foto. El bombero cordobés mostró a los asistentes fotografías y vídeos en un ordenador portátil de algunos de los momentos más duros de su trabajo en Lesbos.
Una de las llegadas a Lesbos el pasado domingo
Joaquín Higueras pertenece a Proem-Aid, un equipo español de profesionales de las emergencias (bomberos, buceadores, nadadores de rescate, sanitarios) que ayudan de forma voluntaria desde diciembre de 2015 en el sureste de la isla griega de Lesbos, auxiliando y rescatando a personas en grave riesgo en el mar, siempre en aguas griegas y bajo el consentimiento de la Guardia Costera Griega. El año pasado llegaron más de 500.000 personas a Lesbos, además de a otras islas griegas, después de un largo viaje lleno de penalidades. Desde el 20 de marzo de 2016, en virtud del acuerdo UE-Turquía que le cuesta a Europa 6.000 millones de euros, los inmigrantes son repatriados al país turco.
