En concreto, la oenegé colona ha ganado el tercer premio a la solidaridad en la categoría internacional de los galardones anuales que otorga la revista Telva. La gala de la 28 edición se celebró esta semana en el auditorio de la Fundación Rafael del Pino de Madrid, con una presentadora de excepción, Anne Igartiburu.
Con la cuantía económica del premio (4.000 €), Amigos de Ouzal podrá instalar en el centro sanitario Saint André de la zona selvática de Yangben (Camerún), una segunda incubadora. Este dispensario tiene unos medios muy precarios para las madres gestantes y los bebés recién nacidos, por lo que este equipamiento mejorará la supervivencia de muchos niñ@s prematuros.
Seis fueron los proyectos elegidos -con mucha dificultad por el jurado de entre todos los recibidos en la redacción- para entregarles la T de TELVA tan deseada, además de contar con los fondos, donados por los patrocinadores, para realizarlos.
El jurado de este año ha estado formado por Carolina Herrera, María del Pino, María de León, Kubrat de Bulgaria, Margarita Vargas, Marian Rojas, Tamara Falcó, Cayetano Martínez de Irujo, Alejandra Vallejo-Nágera, Aruca Fernández Vega y Lucía Francesh, subdirectora de TELVA.
Y los patrocinadores han sido: Inditex, El Corte Inglés, Fundación Mahou San Miguel, Marco Aldany, Allfunds, Cosentino, Tendam, Fundación Rafael del Pino, Cantabria Labs y Unidad Editorial, que han donado un total de 67.500 euros para realizar los proyectos.
Más sobre el proyecto: Una incubadora para bebés prematuros
En el dispensario de Yangben, a 120 kilómetros de la capital de Camerún, las Ursulinas de Jesús atienden a más de 150 mujeres embarazadas al año. La ONG cordobesa AMIGOS DE OUZAL, ganadora del 3er premio internacional, dotado con 4.000 euros, adquirirá una incubadora para los bebés prematuros, cuyos padres no pueden pagar su estancia en el hospital.
Las monjas Ursulinas de Jesús atienden, desde 1952, el dispensario de Yangben, enclavado en plena selva en el centro de Camerún. En un país donde hay 1,9 médicos por cada 10.000 habitantes, este dispensario, está dirigido por una hermana enfermera, Isabelle Raolirina, ayudada por otro enfermero y dos jóvenes asistentes. La gente de la zona, que se dedica mayoritariamente a la agricultura de subsistencia, acude con enfermedades como el SIDA -que después de 25 años de lucha sigue siendo un mal endémico-, la malaria, epilepsia, diabetes o hipertensión. También acuden las mujeres para ser atendidas en el parto.
El pasado mes de marzo nacieron 14 bebés, tres de ellos prematuros, piensan que debido a los efectos del Covid. A uno de ellos lo enviaron al hospital más cercano, pero no siempre es posible porque los padres no pueden pagar la estancia. Aún así hay bebés que sobreviven.
La ONG Amigos de Ouzal apoya las iniciativas de estas hermanas desde hace más de 20 años. En su última visita a los proyectos que realizan en Camerún en 2019, les pidieron ayuda para mejorar la zona de maternidad y la necesidad urgente de una incubadora.
Con el premio TELVA podrán adquirirla y supondrá un gran avance en la supervivencia de los bebés recién nacidos antes de tiempo, en un país donde la tasa de mortalidad en menores de 5 años es de 95 por cada 1.000 recién nacidos vivos.
