Bastante más gente, todo hay que decirlo, que en la jornada del Jueves Santo. Y es que el Cristo de la Sangre pisaba la calle cuatro años después, ya que en 2019 no salió por la lluvia y luego vinieron los dos años de restricciones por el covid.
El paso presentaba como mayor novedad la terminación de la canastilla superior en dorado. Su primera «levantá», nada más salir de la iglesia, se la dedicó al joven Cristian, que junto al paso recibió también un clavel rojo de la mano del capataz, Manuel J. Adame. Luego vinieron otras también emotivas, como la dedicada en la calle Écija a Víctor M. Cepedello, fallecido en diciembre de 2019.
En ese punto, como es tradición, se produjo el emocionante encuentro entre el Cristo y la Virgen, al son de la única banda de música participante en esta edición de la Semana Santa colona, que acompañaba al paso de Ntra. Sra. de los Dolores. La Banda Ateneo Musical, de Écija, demostró su alto nivel durante todo el recorrido.
Destacar la labor de las 24 costaleras de los Dolores, veintidós de las cuales repetían por segundo día consecutivo tras la salida del Jueves Santo. Por otro lado, reseñar que la talla de la Virgen ha sido restaurada este año por algunas grietas y que llevaba un pañuelo bordado de encaje de bolillos regalado por la pregonera de la Semana Santa 2022, Rafaela Díaz.
Sobre las 23.30 h. se recogió la procesión, dando paso media hora después a la salida del Santo Sepulcro, que congregó a una muchedumbre en la Plaza Real. Componentes de la Agrupación Parroquial de Jóvenes portaban la impresionante talla del Cristo Yacente, obra del imaginero, Juan M. Miñarro.
El extenso cortejo fúnebre, acompañado por el Trío Musical de Cámara Astigi, estuvo formado por decenas de niñas y niños, herman@s mayores de todas las hermandades, los párrocos de la localidad y otros, autoridades municipales encabezadas por el alcalde de la Colonia, sargento del Puesto de la Guardia Civil de Fuente Palmera, etc.
Por último, reseñar igualmente la colaboración de la Coral de Mayores de Fuente Palmera, que antes de la salida del Cristo de la Sangre interpretó dos canciones en la iglesia dedicadas a las tres imágenes titulares de la Semana de Pasión, el Nazareno, los Dolores y la Sangre.