Su intervención ha comenzado dando la enhorabuena a las Asociaciones de Mujeres de la Colonia de Fuente Palmera que a la misma hora estaban en Diputación recibiendo el Premio al Movimiento Feminista dentro de los Premios Córdoba en Igualdad 2024.
«Por ello hoy nuestra concejala de Igualdad, Laura Sánchez, y las trabajadoras del Centro Municipal de Información a la Mujer no nos pueden acompañar en este acto ya que están junto a las asociaciones en la Diputación», señalaron.
Sobre el 8M han dicho que «debería de ser un día de celebración por todos los logros conseguidos, y sí son muchos, sobre todo en países como el nuestro, pero todavía queda un largo camino pues siguen produciéndose discriminaciones y hasta tanto esto ocurra debemos seguir reivindicando por conseguir que la igualdad sea real y efectiva, en cada rincón del planeta, empezando en nuestros propios hogares, en nuestros trabajos y en todos los ámbitos de nuestra sociedad».
A continuación se ha dado lectura del Manifiesto Institucional consensuado por las ocho diputaciones andaluzas, al que el Ayuntamiento de Fuente Palmera se ha sumado y que constata «la realidad que siguen sufriendo las mujeres de todo el mundo, incluidas las mujeres de nuestro municipio y como es nuestra obligación, no sólo como institución sino como personas, con nuestro compromiso el erradicar en cualquier ámbito en el que se dé cualquier ápice o indicio de discriminación».
Por ello la campaña del Ayuntamiento de Fuente Palmera del 8M tiene como slogan este año Está en tus manos conseguir la igualdad. «El compromiso individual, junto al compromiso colectivo e institucional suman para lograr que entre todos y todas logremos atajar cualquier atisbo de discriminación y con ello lograr un mundo sin discriminaciones».
En cuanto al manifiesto de las diputaciones, uno de los temas donde pone el foco es el repunte del machismo entre la juventud. Esto se manifiesta a través del aumento de situaciones que creíamos superadas: la violencia sexual, la mercantilización del cuerpo de las mujeres, la tolerancia con la violencia verbal hacia las mujeres, la permisividad hacia el consumo precoz de pornografía, entre otras prácticas indeseables que se van afianzando e instalando entre la población más joven.
La diferencia con respecto a épocas anteriores está en que en la era digital las violencias y discriminaciones se ejercen además desde las redes sociales y con nuevos apoyos tecnológicos, que siguen perpetuando las desigualdades.
Además, se rechazan rotundamente el surgimiento de voces que dicen que la desigualdad entre hombres y mujeres es una situación inventada, así como posturas reaccionarias contra leyes que mejoran la calidad democrática de nuestro país con la participación de toda la ciudadanía en igualdad de condiciones de mujeres y hombres.
