Entre ellos, muchos de La Colonia, de la comarca, de Córdoba y de otras provincias, unos representando a motoclubs, otros a título particular y muchos grupos de amig@s y vecin@s.
Integrantes del club Viejas Glorias de Fuente Palmera Por ejemplo, Viejas Glorias de Fuente Palmera o los Pinchacunetas de Cañada del Rabadán. La comarca entera con moter@s de Écija, La Carlota, Palma del Río, Posadas o Almodóvar. Y también de La Rambla, Bujalance, Lora del Río, Marchena, La Lantejuela, La Campana, Andújar, El Saucejo, Alcalá de Guadaíra, Córdoba capital y un largo etcétera. El evento ha coincidido con el vigésimo aniversario de la fundación del club, que en la actualidad cuenta con 93 socios y sigue adelante por el empeño, el trabajo y la pasión de los seis hermanos Domínguez Rivero por el mundo del motor y las dos ruedas, con los que colaboran otras tantas personas para organizar las actividades. Mención aparte para los patriarcas de la familia Domínguez Rivero, que han cedido una parcela de su propiedad para que sus hijos la conviertan y la adapten a lo que hoy es su primera sede motera en veinte años, que incluso se quedó pequeña en esta ocasión para albergar el volumen de visitantes que pasaron desde el sábado por sus instalaciones. Con anterioridad han utilizado como sede el Bar Pepín o el antiguo Bar Reyes.
Hasta dieciocho tiendas de campaña se levantaron en la zona de acampada -vigilada y con duchas y aseos-, para aquellos que han pernoctado estos días, que han disfrutado de una estancia agradable y una gran acogida por los villareng@s. Antes, en la jornada del viernes, ya comenzaron a calentar motores, nunca mejor dicho, pues El Villar también celebraba el inicio de la feria.
{loadposition publinoticia}
Como es fundamental en las concentraciones moteras, la animación corre a cargo de un speaker y el Motoclub La Ciudad Sin Ley volvió a confiar en el maleno Antonio Manuel Estévez, que ya estuvo en la concentración de hace dos años celebrada en Cañada del Rabadán. El sábado, en la primera jornada oficial de la concentración, hubo juegos, regalos, aperitivos, exposición de motos clásicas, fiesta del agua a cargo de l@s camarer@s, concurso de lanzamiento de neumáticos y un concierto de rock con el grupo Cuarto Creciente. Además, durante toda la concentración hubo servicio de guarda ropa y guarda cascos y dos amplios stands de merchandaising.
El domingo desde las diez de la mañana se abrieron las inscripciones, en las que participaron cerca de 200 moteros que por siete euros se vieron beneficiados de camiseta, consumiciones, arroz, un pin metálico, número para sorteos, obsequio recordatorio y degustación en Bar Mesón Pepín. También prosiguió el concurso de neumáticos, la animación y la buena música de Antoni M hasta llegar al mediodía con un gran perol para todos los inscritos. Posteriormente se procedió a la entrega de trofeos a los cinco motoclubs con más inscritos, al más lejano (que vino de Trigueros, Huelva), al motero más veterano (un loreño de 68 años), a la moto mejor personalizada(Baena), al chaleco con más pins, al motero más lejano que vino por libre, al ganador del concurso de lanzamiento de neumáticos, y prácticamente hubo un trofeo para todos los clubes inscritos, que fueron veintisiete, aunque en realidad pasaron por la concentración algunos más que no se inscribieron porque o bien iban de paso o estuvieron sólo en la jornada del sábado. También recibieron un obsequio un director de carrera de la Federación Andaluza de Motociclismo (FAM), que supervisó el acondicionamiento de las instalaciones, las medidas de seguridad y el buen desarrollo del evento, y el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Fuente Palmera, Quique González, que estuvo también de visita en la feria compartiendo la tarde del domingo con vecin@s y miembros de la Hermandad de San Isidro Labrador. El Consistorio colono ha colaborado con el préstamo de las carpas.
El presidente, Jaime, con los Pinchacunetas de Cañada
Homenaje del motoclub al matrimonio Domínguez Rivero
Sin duda, el momento más emotivo de la concentración tuvo lugar con la subida al escenario de los padres de los hermanos Domínguez Rivero, que recibieron el cálido homenaje de sus hijos, nueras, niet@s, prim@s y demás familia y miembros de la junta directiva del motoclub, agradeciendo así su implicación y colaboración con la cesión de los terrenos y compartiendo la afición por las motos con todos ellos.
A continuación, siguió el espectáculo con la animación lavamotos, tirada de regalos y una gran despedida. En definitiva, gran éxito de esta IX Concentración desarrollada bajo un ambiente sano, deportivo, sin locuras motociclistas y en total armonía por parte de tod@s los asistentes.
Al final del artículo ofrecemos más fotos en la Galería de Imágenes.
