Lo último que sabíamos públicamente de María del Mar Delgado -y quizá lo primero y único para muchos- fue cuando en 2016 fue distinguida como Colona del Año por el Ayuntamiento de Fuente Palmera.
En ese momento conocimos numerosos detalles de su trayectoria académica y personal. Terminó sus estudios en el IES Colonial en junio de 2008 con una nota media de 8.20, tras cursar la modalidad de Ciencias de la Salud en Bachillerato.
Seguidamente empezó la Licenciatura en Química en la Universidad de Córdoba (UCO), que culminó en julio de 2013 con una nota media de 8.80, obteniendo la segunda nota más alta entre los alumnos que terminaron la licenciatura en 2013.
Luego disfrutó de becas para investigación, realizó varios máster, consiguió algún premio y en 2016 estaba estudiando el Doctorado en Química Fina en la UCO. Para entonces había publicado varios artículos científicos en revistas internacionales de alto índice de impacto y cuatro comunicaciones a congresos.
También participó en proyectos de investigación científica del Ministerio de Economía y Competitividad (MINECO), principalmente en el área clínica y nutricional, y en proyectos de Excelencia de la Junta de Andalucía, desarrollando y aplicando plataformas que implican el uso del sudor y del aliento condensado para la búsqueda de biomarcadores de cáncer de pulmón.
Como pueden comprobar, una colosal carrera que en estos últimos siete años María del Mar se ha encargado de dar continuidad a base de tesón y sacrificio. A finales de 2019 termina su tesis doctoral en Química en la Universidad de Córdoba.
Durante y después de la tesis doctoral, visita y realiza estancias de investigación en diferentes laboratorios en Europa, como la Universidad de Agronomía de Viena, la Universidad de Gante o el Laboratorio para el estudio de residuos y contaminantes en los alimentos de Nantes.
«Estas estancias me han permitido usar instrumentación innovadora, y colaborar con profesores e investigadores de todas las partes del mundo, incluso de la Universidad de Sudáfrica. Después de terminar la tesis, me incorporé a la Universidad de Granada, donde continuo investigando sobre metabolómica, pero ahora también sobre micotoxinas, que son compuestos tóxicos producidos de forma natural por algunos tipos de mohos. Estas micotoxinas se encuentran en diversos alimentos, y algunas de ellas son altamente cancerígenas», nos cuenta María del Mar.
Actualmente, trabaja en la Universidad de Granada como Personal Investigador Doctor. Investiga en el grupo de Calidad en Química Analítica Alimentaria, Ambiental y Clínica y simultáneamente imparte docencia en la Facultad de Farmacia, en el grado de Farmacia, y en la Facultad de Ciencias, en el grado de Ingeniería Química.
Los premios
2022 ha sido un año gratamente especial para nuestra paisana con la concesión de dos premios a su tesis doctoral. El primero fue un premio del Grupo Regional Andaluz de la Sociedad Española de Química Analítica. Este reconocimiento se otorga a tesis de investigadores que la hayan realizado en el área de la Química Analítica y en una universidad andaluza.
«En mi caso, mi tesis resultó premiada en la convocatoria de 2020, y me invitaron a recoger este premio en la 17ª Reunión del Grupo Regional Andaluz de la Sociedad Española de Química Analítica en Sevilla en septiembre de 2022», apunta.
La segunda distinción fue el Premio Miguel Valcárcel: SEQA 2021 a la mejor Tesis Doctoral en Química Analítica. «Este segundo premio es también muy emotivo para mí, porque además de ser un reconocimiento a nivel nacional, lleva el nombre del Prof. Dr. Miguel Valcárcel; el cual, además de ser una referencia en la Química Analítica a nivel internacional, fue mi profesor cuando estudiaba la licenciatura y lo recuerdo con gran admiración».
Este reconocimiento se otorga a tesis del área de la Química Analítica realizadas en una universidad española. En este caso, recogió el premio en la XXIII Reunión de la Sociedad Española de Química Analítica en Oviedo en julio de 2022.
Sobre el efecto de estos premios, María del Mar afirma que «aún no han tenido repercusión en mi sector laboral, pero sí serán una forma de demostrar mi trabajo bien hecho y un extra en mi currículum en el caso de que optase a seguir en la Universidad. Para mí personalmente, son un reconocimiento al esfuerzo y al sacrificio realizados durante mi etapa predoctoral».
La Química Analítica y la I+D en España
Para adentrarnos en la rama de la Química Analítica, nos explica que básicamente es la disciplina que asume la responsabilidad del Análisis; la disciplina cuya diana es la generación de información (bio)química; y la disciplina de las medidas (bio)químicas y, por tanto, la de la Química relacionada directamente con la metrología en (bio)química.
Algunos de los retos de la Química Analítica son la búsqueda de información analítica más amplia y de mayor calidad, y también el empleo de menos material, menor tiempo, menores esfuerzos humanos, menos costes y menos peligros para el operador y medioambiente (ej. métodos de análisis “verdes o limpios”).
En cuanto al nivel de Investigación en España, señala que nuestro país se encuentra por debajo de la media de la Unión Europea. El presupuesto público destinado a I+D en España en 2021, según la Oficina Europea de Estadística, fue de 152 euros por persona, frente a 244 euros que se destinó en la Unión Europea. De hecho, las asignaciones presupuestarias públicas para I+D en euros por persona disminuyeron en España en la última década (de 155 euros en 2011 a 152 euros en 2021).
«Por lo que, desde mi punto de vista, nuestro país no se encuentra en una situación privilegiada con respecto a Europa, sin tener en cuenta que en países como Estados Unidos, Japón o Corea se invierte mucho más que en Europa. Esta situación produce que muchos de los investigadores capacitados y formados en España migren a otros países con mayores oportunidades. En mi opinión, sería necesario ofrecer mejores condiciones para atraer científicos, hacerlos sentir cómodos y permitirles hacer su trabajo».
Su familia y su pueblo
Por último, al preguntarle qué piensa su familia de su trayectoria, indica que «se siente muy orgullosa de lo que hago, y respetan y comprenden el valor que tiene para mí».
Y sobre si viene mucho por Fuente Palmera, reconoce que no tiene mucho tiempo libre, «pero siempre que puedo vuelvo a visitar a mi familia y a estar en mi casa. Echo de menos la calidad de vida que hay en el pueblo, la familia, la comida, la naturaleza, … Y al ser el lugar donde crecí, siempre me trae una sensación de nostalgia».