Estas palabras fueron algunas de las que le dedicó Diego Ballesteros a Juan Ramírez en un artículo publicado en Diario Córdoba el 24 de enero de 2008, una semana después de su muerte.
Fuente Carreteros sigue añorando a una persona que lo dio todo por su pueblo, un luchador incansable por los derechos de sus vecinos. Hoy ha tenido lugar un gran día de convivencia en la Casa Grande de Fuente Carreteros con la celebración de la séptima edición de los premios que llevan su nombre y el 8º Día de Olivo-Independientes. Alrededor de trescientas personas se han reunido en una jornada donde se recordó la figura de un hombre que fue uno de los principales promotores de la autonomía de Fuente Carreteros. Fue alcalde pedáneo en los años 1988 y 1989, y, una vez constituida la ELA, ocupó la alcaldía de 1989 a 1999 y entre los años 2003 y 2007. Asimismo, cumplió un papel importante en la política de La Colonia de Fuente Palmera desde su puesto de vicesecretario general de Olivo. Tras su defunción, fue declarado Hijo Predilecto de Fuente Carreteros(7 de marzo de 2008) y de La Colonia de Fuente Palmera(5 de julio de 2008). También destacó su trabajo en la Federación de Pueblos por su Autonomía y en la Federación Andaluza de Entidades Municipales, donde animó y apoyó a muchas localidades que querían lograr mayor cuota de autogobierno.
La agrupación local de Olivo-Independientes de Fuente Carreteros instauró en su memoria los Premios Anuales Juan Ramírez, con los que se pretende reconocer la labor de aquellas personas o colectivos, relacionados con Fuente Carreteros, que se han distinguido por la defensa de los intereses de este pueblo, por difundir el nombre e idiosincrasia de la localidad.
Igualmente, reconocen a aquellas personas que poseen unos especiales valores humanos, sociales, culturales, artísticos, etc.
En la edición de este año los galardonados han sido:
–Diego Cañamero Valle, que fue secretario general del Sindicato de Obreros del Campo y actual portavoz del Sindicato Andaluz de Trabajadores(SAT), por toda una vida dedicado a la defensa de los derechos de los jornaleros y jornaleras de Andalucía.
– Dolores Utrilla Blázquez, vecina de Fuente Carreteros, por su colaboración incondicional y altruista con todas las asociaciones de la localidad.
– El grupo de personas que en el año 1982 recuperó la Danza de los Locos, principal seña de identidad de Fuente Carreteros que se perdió durante 30 años. Estos carretereños fueron: Juan Pavón, Raimundo Mínguez, Pedro Aguilar, Valeriano Ruiz, Antonio Romero, José Morello, Francisco Martín, José Manuel Pedrosa, Bernabé Ruiz, Juan Manuel Morello, Florentino Conrado, Juan Ruiz, Emilio Díaz, Ramón González, Eugenio Mínguez, Rafael Mínguez, Antonio García, Salvador García, Juan García y Francisco Rivero.
Pilar Martínez entrega el premio a Diego Cañamero
Antes de la entrega de las estatuillas, realizadas por el escultor José Balmón, intervinieron el alcalde de la ELA y secretario general de Olivo en Fuente Carreteros, José Manuel Pedrosa, y la presidenta de Olivo de La Colonia, Teresa Fernández.
Pedrosa felicitó a los premiados y agradeció la asistencia de todos «en un día de convivencia y reencuentro donde rendimos homenaje con los Premios Juan Ramírez a personas que por su trabajo o lucha han destacado en su servicio hacia los demás y hacia su pueblo, que nos han demostrado una vida de sacrificio, solidaridad, constancia, esfuerzo, superación y colaboración». El alcalde también señaló que «este tipo de personas con grandes valores humanos las podemos poner como ejemplo para luchar por cambiar este obsoleto sistema económico que ha dejado de lado a las personas en beneficio de la banca y los poderosos. Hoy más que nunca es necesario el cambio, ante la situación cada vez más crítica de los trabajadores, ante los recortes en educación, sanidad, servicios públicos, etc.
Dolores Utrilla, acompañada por su familia Mientras el bipartidismo negocia para pagar la deuda, el hambre vuelve a aparecer como en la posguerra. Ahora que llegan las elecciones debemos utilizar nuestro voto para acabar con el despilfarro, el saqueo de lo público y exigir políticas encaminadas a tener un mejor futuro para todos, y sobre todo, un presente y futuro más dignos para nuestros hijos».
Por su parte, Teresa Fernández, centró su intervención en rememorar la figura de Juan Ramírez, del que dijo que fue «un hombre que construyó un pueblo y nos enseñó que hay que ser coherentes, fuertes y levantarse ante las adversidades».
A continuación, se pasó a la entrega de los premios. Antonia Adame leyó a grandes rasgos la biografía y trayectoria de Diego Cañamero, el cual recibió el galardón de manos de Pilar Martínez, esposa de Juan Ramírez.
Grupo que recuperó en 1982 el Baile de los Locos Cañamero, que estuvo acompañado en el acto por Aroa Moro, responsable provincial del SAT y vecina de Ochavillo del Río, empezó diciendo que «este reconocimiento no es para mí, sino para todos los trabajadores que de forma anónima luchan día a día, para aquellos que están en las manifestaciones, pegando carteles, etc., que son los que hacen que algunos tengamos una cierta apariencia pública». El líder sindical hizo un llamamiento a la unidad, a la movilización y a la lucha para cambiar la situación del país, «donde estamos gobernados ahora mismo por un partido corrupto, por lo que tenemos que tener la conciencia clara para ir cambiando…Estoy seguro que en cada hoja de estos olivos y naranjos que hay por aquí está el sudor y vuestro sacrificio. Nosotros y vosotros hemos construido todo esto, lo hemos levantado, y parece que ahora tenemos que estar agradecidos por el subsidio agrario…Nos tratan con limosna, después de 45 años cotizados nos dejan 600 euros de pensión…por lo que anino a este pequeño pero gran pueblo a provocar el cambio».
Seguidamente, recibió el premio Dolores Utrilla Blázquez de manos de Laura Ramírez, hija de Juan Ramírez. Loli también tuvo un pequeño homenaje de su familia, que subió al escenario para entregarle una placa y dos de sus nietas le dedicaron unas emotivas palabras por su vida de sacrificio y entrega hacia sus seres queridos.
Y por último, se entregó el galardón al grupo de vecinos que recuperaron en 1982 el Baile de los Locos. La estatuilla y un pin representativo de la misma a cada uno de ellos, les fue entregado por María del Carmen, Manuel y Miguel, hermanos de Juan Ramírez. La historia de cómo surgió este grupo de personas, claves para que hoy en día siga viva la tradición, la narró Beatriz Pedrosa.
La fiesta continuó en la Casa Grande con la degustación para todos los asistentes de una paella y de platos populares aportados por personas colaboradoras y voluntarias. Además, la sobremesa estuvo amenizada por el grupo musical «Son de Caña» y durante toda la jornada los más pequeños disfrutaron en el exterior de juegos y castillos hinchables.
