En el interior de la entidad, que había abierto pocos minutos antes, no había clientes y sólo se encontraban sus dos únicos trabajadores, entre ellos la directora. Los delincuentes se han incautado de un botín de unos 9.000 euros procedentes de la caja que se utiliza para la actividad diaria. Aunque ordenaron a los responsables del banco que abrieran la caja fuerte, ésta dispone de un sistema de retroceso por la que tarda diez minutos en abrirse, por lo que los ladrones no quisieron esperar y huyeron en un vehículo que tenían al final de la calle, no sin antes apropiarse de los teléfonos móviles de los trabajadores.
Según el testimonio de algunos vecinos, dos hombres forasteros se encontraban en los extremos de la calle donde está el banco pocos minutos antes de las 8.30 horas. Un tercer individuo fue el que llamó a la puerta de la entidad, que siempre permanece cerrada por seguridad y tienen que abrirla los trabajadores desde el interior -este sistema se implantó después el último robo sufrido hace unos años-. En el momento que se abrió la puerta, el individuo la atrancó con una silla para que no se cerrara y de inmediato llegaron sus dos compañeros. Tras proceder al robo, huyeron como hemos indicado anteriormente. Según ha podido saber este periódico, los atracadores tienen un marcado acento andaluz, único rasgo que se pudo advertir, ya que el rostro lo tenían cubierto totalmente con el pasamontañas. La Guardia Civil llegó pocos minutos después y ha abierto una investigación. Hasta el momento, no hay ningún detenido. El banco ha permanecido cerrado durante toda la mañana.
No es el primer robo que sufre la sucursal de Cajasur de Fuente Carreteros. Hace unos tres años, los ladrones, armados con pistolas, se llevaron cerca de 40.000 euros. El de hoy es el tercer atraco en sus casi treinta años de existencia en la entidad local autónoma.
