La iniciativa, organizada por el Ayuntamiento de Fuente Palmera en colaboración con el alcalde pedáneo de La Peñalosa, Luis Raya, asociaciones y vecinos, contó con la participación de cerca de 200 personas, las cuales salieron del bar del pensionista sobre las 8 de la mañana para recorrer a pie los dos kilómetros aproximadamente que separan el núcleo de la glorieta de La Herrería.
También hay que destacar la colaboración de dos motoristas de Tráfico y de la Agrupación Local de Protección Civil. La marcha se desarrolló sin ningún problema y en la misma participaron bastantes integrantes de la familia Guzmán Castillo, para los que significó una jornada muy especial.
Al llegar a la glorieta, el alcalde, Francisco Javier Ruiz, y el primer teniente de alcalde, Quique González, tuvieron unas palabras para los asistentes, en las que lamentaron que en muchas ocasiones se ponga remedio a las cosas cuando sucede algo grave, en referencia al cierre de la glorieta, el cual se materializó casi nueve años después del fatal accidente.
Fue un 3 de diciembre de 2007, a primera hora de la mañana, cuando se produjo el trágico suceso en el cruce de La Herrería al colisionar el vehículo de Manuel y María de la Cruz con otro que venía por la carretera de Posadas en dirección a Fuente Palmera. Manuel prácticamente murió en el acto y su hija falleció al día siguiente en el hospital. Tenían 61 y 21 años, respectivamente.
Siguiendo con el acto, Rosa Guzmán, hija de Manuel y hermana de María de la Cruz, descubrió una placa homenaje a la familia en la estatua que se ubicó hace unas semanas en el centro de la glorieta, que representa a un ángel mirando hacia La Peñalosa. En la placa reza: Desde aquí hasta el cielo «Recordar es fácil para el que tiene memoria, olvidarse es difícil para quien tiene corazón» (Gabriel García Márquez). También se depositó un ramo de flores.
A renglón seguido las vecinas y vecinos volvieron de nuevo a pie hacia La Peñalosa.