En la marcha, participaron más de 600 alumn@s, profesor@s, componentes de las asociaciones de mujeres Victoria Kent, Vema, Dolores Azúca, Clara Campoamor, Josefa Alegre y Ana Díaz, las técnicas del Centro Municipal de Información a la Mujer, algunos representantes políticos y del equipo de gobierno, entre ellos el alcalde, Francisco Javier Ruiz.
Pasadas las doce del mediodía partió la manifestación, que fue recibida en el García Lorca por más de 450 niñ@s. Ambos centros compartieron el slogan ‘Pasados tristes dejemos atrás’, transmitiendo un mensaje de optimismo para el futuro, dejando atrás lo negativo y pensando en positivo. En este sentido se basó el manifiesto leído por Sergio García, exalumno del IES Colonial y estudiante de periodismo: «…debemos cambiar la palabra violencia por la palabra amor, la de tristeza por la de felicidad, debemos ser personas solidarias que permitan hacer felices a los demás y que aún en los momentos más duros siempre seamos capaces de sacar una sonrisa….pensemos que cuando surge un caso de violencia de género no golpean sólo a una persona, sino que golpean a toda la sociedad, a nuestros principios y a nuestros derechos…con esta lucha diaria no buscamos una ausencia del miedo, sino la igualdad y la libertad de todas las personas».
Como acto simbólico, alumn@s del instituto cogieron de la mano a alumn@s del García Lorca, portando estos zapatos rojos, e hicieron un pequeño recorrido para depositarlos todos juntos delante de una pancarta que decía ‘Para vivir presentes y felices’. El color rojo representa la violencia, la sangre, pero también la pasión y la vida. Y el calzado suele ser la primera prenda que se encuentra de las víctimas. Esta iniciativa, con sus detalles propios, y otras similares se han producido en muchos puntos de España y del mundo, y tienen su origen en la obra ‘Zapatos Rojos’ de la artista mejicana Elina Chauvet, que denunció en 2009 en Ciudad Juárez la pasividad de la población y del gobierno ante el número de mujeres asesinadas.
A continuación, los manifestantes retomaron las calles de Fuente Palmera en dirección a la Plaza Real, donde l@s alumn@s se colocaron alrededor de la misma mostrando las numerosas pancartas en repulsa hacia la violencia de género. En la lectura de manifiestos, este año el instituto le ha dado más protagonismo a l@s alumnos. No obstante, en la presentación en la plaza, una de las profesoras recordó algunos datos sobre esta lacra de la violencia machista, tales que como en los últimos diez años han sido asesinadas cerca de 700 mujeres en nuestro país. Asimismo, señaló que la manifestación del IES se ha convertido en una seña de identidad del centro escolar y que con ella «queremos levantar la voz por aquellas mujeres que sufren maltrato y por sus hijos, víctimas sin voz de la violencia machista».
Por su parte, la directora del IES Colonial, María José Aguilera, agradeció el trabajo que todos los años realiza el Centro Municipal de Información a la Mujer y las distintas asociaciones de mujeres, que siempre les acompañan en la manifestación. Igualmente, agradeció la colaboración del Ayuntamiento, destacando la ornamentación que ha presentado este año la calle Portales y la Plaza Real, teñidas con el color lila que representa al 25N, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia hacia las Mujeres.
Por último, intervino el alcalde de La Colonia de Fuente Palmera, Francisco J. Ruiz, que indicó que «hoy estamos de nuevo aquí por varias razones, entre ellas porque las respuestas de las instituciones ante las denuncias de las mujeres siguen siendo insuficientes, porque sigue siendo no demostrable el maltrato psicológico, porque se tiene que dotar de recursos la Ley Integral contra la Violencia de Género, porque incluso habiendo denunciado las mujeres siguen siendo asesinadas, porque son numerosos los asesinos que cuentan con antecedes de maltrato, porque los asesinatos machistas no entienden de relaciones sentimentales, porque se recorta en políticas de igualdad suprimiendo las campañas de prevención de violencia de género, porque urgen asignaturas educativas que formen en igualdad y en coeducación a la misma vez que en formación del profesorado, porque a algunos medios de comunicación hay que exigirles un verdadero compromiso, porque las mujeres no son muertas, sino asesinadas por la sinrazón que lleva a algunos a pensar que la vida de las mujeres les pertenece… Y hay otras mujeres que siguen sobreviviendo, haciendo sus vidas supuestamente normales, pero que siguen sufriendo violencia machista, por lo que tienen que ser una prioridad, que sientan que las arropamos desde las instituciones y desde la ciudadanía. ESTA LUCHA ES LA DE TODOS Y LA DE TODAS, NINGUNA AGRESIÓN MÁS. NINGÚN ASESINATO MÁS».
Finalmente, se guardó un riguroso minuto de silencio y se realizó una suelta de globos reivindicando a La Colonia de Fuente Palmera como municipio libre de la violencia de género.
Performance en el Instituto
Por la tarde, en el SUM del IES Colonial tuvo lugar una performance a cargo de un grupo de Posadas. En la misma, se escenificó cómo una relación de pareja comienza muy bonita de novios y poco a poco se va transformando en una relación tóxica que acaba en violencia de género; el maltrato surge cuando el hombre empieza a hacer prohibiciones a la mujer tales como que no quiere que hable con otras personas, imponiéndole la vestimenta, sobre quién tiene que hacer las tareas domésticas, etc., hasta que culmina en un maltrato físico, aparte del psicológico por todo lo anterior. También se puso en escena cómo la mujer, por miedo a quedarse sola o por sus hijos, no se acaba separando de la pareja.
Entre el público asistente se encontraba la concejala de Igualdad del Ayuntamiento de Fuente Palmera, Marta Montenegro, a la que preguntamos su visión global acerca del tema de la violencia de género: «En general creo que hay muy pocas medidas para su prevención y que no se invierte en formación ni en coeducación, tanto en l@s niñ@s como en profesor@s. También pienso que hay que concienciar más a las familias para que asistan en mayor número cuando se organiza algún taller o actividad relacionado con la igualdad o la violencia de género. Lo que pasa es que si desde el Estado se restringen las políticas de Igualdad es muy difícil que el ciudadano de a pie se conciencie sobre el tema».
En opinión de la concejala, otra de las claves de esta problemática es que “las mujeres no se deciden a denunciar cuando sufren cualquier tipo de maltrato, sino cuando se produce un acto grave, o como ya vemos los casos, muchas son asesinadas y no han llegado a poner ninguna denuncia por maltrato; es cierto que una vez puesta la denuncia sí existen medidas, aunque también estas llegan tarde en algunas ocasiones por el retraso que tenemos en los juzgados”. Por último, Marta Montenegro quiso reconocer públicamente el gran trabajo realizado en las últimas semanas por las técnicas del Centro Municipal de Información a la Mujer, Luz María Borrueco y Mari Carmen Lucena, en torno a las actividades del 25N y la labor de incentivar a las asociaciones de mujeres, vecinos y vecinas de La Colonia en la participación de las mismas. Sin embargo, “echo en falta algo más de implicación por parte de la ciudadanía, ya que, por ejemplo, no se consiguió llenar el autobús para la manifestación del pasado domingo en Córdoba”.
