De las siete familias afectadas -aunque los propietarios particulares de las parcelas son más- por la futura ubicación o paso de las instalaciones por sus terrenos, han sido cuatro las que han acudido al encuentro, además de algunos vecinos, el portavoz municipal del partido socialista, Antonio Javier Guisado y Antonio Adame, en representación del PP. En la parte técnica han estado presentes Isabel Peña, responsable de mantenimiento de la zona sur, y Luis Moya, gerente de Emproacsa; Rubén Fernández, de la Delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía; Miguel Viñuela, técnico del equipo de redacción del proyecto; Antonio José Sepúlveda, ingeniero agrónomo del Ayuntamiento de Fuente Palmera; y Francisco Javier Ruiz, alcalde de La Colonia.
Esta reunión ha sido fruto del compromiso del Consistorio para que se trasladaran a Fuente Palmera los técnicos de la Junta de Andalucía responsables del proyecto de construcción de la Estación Depuradora de Aguas Residuales, con el objetivo de dar transparencia a una actuación de gran envergadura presupuestada en casi seis millones de euros.
Como suele ocurrir en estos casos donde las obras públicas se tienen que llevar a cabo en propiedades privadas y provocan expropiaciones o tienen que discurrir por las mismas, es normal que se genere incertidumbre e inquietud entre los parcelistas. Igualmente ha ocurrido en una parte de la ciudadanía a raíz de las publicaciones en redes sociales y en panfletos repartidos por los comercios sobre la oposición a la construcción de la estación de bombeo por sus hipotéticas consecuencias de olores y ruidos al proyectarse su ubicación a escasos metros del núcleo urbano, concretamente en el margen izquierdo del tramo de circunvalación que va desde la carretera Palma del Río (dirección a la Piscina Municipal) hasta la glorieta del cruce hacia Silillos y Cañada del Rabadán (ver imagen).
En aras de la mencionada transparencia ya se produjo un encuentro el pasado miércoles entre los vecinos afectados y todos los grupos políticos municipales. Para el regidor colono, Francisco Javier Ruiz, «lo que queremos para Fuente Palmera es el mejor proyecto y el que dé menos inconvenientes, ya que se trata de un proyecto muy importante de 5’8 millones de euros y que es para siempre para La Colonia, el cual llevamos demandando más de veinte años. Seguimos pagando las multas a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) por no tener depuradora y todos pagamos en el recibo del agua el canon de depuración y/o vertido cada trimestre, sin poder disfrutar aún de esta infraestructura».
En los primeros minutos de la reunión, los vecinos afectados manifestaron a los técnicos su enérgico rechazo a la construcción de la estación de bombeo (en adelante EBAR), situación que se fue suavizando conforme transcurrió la sesión y se fueron aclarando las características de la infraestructura y la posición de cada administración y entidad en el proyecto.
Tanto los técnicos de la Delegación de Medio Ambiente como de Emproacsa afirmaron que se trata de una instalación totalmente fiable que reúne los últimos avances tecnológicos. El gerente de Emproacsa la calificó como EBAR «Premium», lo último en estaciones de bombeo. Asimismo, indicaron que ellos (Junta de Andalucía y Emproacsa), así como el Ayuntamiento de Fuente Palmera son los primeros interesados en que no haya problemas, ya que se trata de una considerable inversión y si luego surgen inconvenientes habría un sobrecoste tanto para el Consistorio como para la Junta de Andalucía. Igualmente, informaron que hay casos de depuradoras que llevan paradas mucho tiempo por averías que no se pueden financiar y cuyo mantenimiento ha estado en manos de empresas privadas a las que no les interesa la reparación. En cambio, Emproacsa defiende su solvencia a través de su programa del Ciclo Integral del Agua.
En definitiva, los técnicos se comprometieron a resolver cuantos problemas pudieran surgir y que la mejor garantía es un correcto funcionamiento y mantenimiento de las instalaciones. Aseguran que los posibles problemas de olores no tienen por qué existir habiendo un óptimo mantenimiento de la instalación. El edificio de la EBAR consta de un sistema de renovación del aire interior mediante el paso por un filtro de carbono antes de ser expulsado al exterior y además hace la función de aliviadero ante un exceso de carga pluvial de las redes de saneamiento, previo desbaste de gruesos antes de ser vertidas al arroyo en caso de sobrecarga de la red.
Por otra parte, invitaron a los afectados a visitar una de sus depuradoras en la provincia de Córdoba como la que está proyectada construir en Fuente Palmera. Además, el alcalde señaló que se va a pedir un informe independiente de impacto ambiental al Servicio de Arquitectura y Urbanismo (SAU) de la Diputación Provincial.
Algunos de los vecinos afectados están representados por Alejandro B. Galán, vecino de Fuente Palmera, técnico local conocedor de la diversas problemáticas del municipio en este ámbito y profesional en las materias de arquitectura, urbanismo y desarrollo sostenible. Bajo el interés de dichos afectados, Alejandro B. Galán trasladó a los técnicos diferentes observaciones y alternativas sobre la infraestructura proyectada. Como nos comentaba tras la reunión, su propuesta está cogida con alfileres porque no ha habido más tiempo para trabajarla ya que el proyecto se encuentra en exposición pública. Además, «se trata de un proyecto de 3.500 folios, superdefinido y muy currado, por lo que alegar ante este derroche de solvencia técnica es complicado, ya que lo suyo es alegar cuando está en fase de anteproyecto».
Plano con la ubicación de la EBAR proyectadaLos afectados le preguntaron si la EBAR podría tener otra ubicación y si se podría trasladar a los mismos pies de la depuradora. Para Alejandro, esa opción implica un problema que es utilizar la red antigua que va pegada al arroyo y que lleva una pendiente muy baja, por lo que habría que hacer obras de entibado y bermas escalonadas de gran complicación. En ese sentido, Alejandro B. Galán coincide con los técnicos de la Junta. Es más, señala que el sitio elegido para ubicar la EBAR es el que hubiera proyectado cualquier técnico desconocedor de la zona, «un sitio viable y estratégico porque dicha EBAR reagrupa todos los vertidos, los desbasta, los limpia, los filtra y, seguidamente, los bombea hacia la estación depuradora».
Para Alejandro «la ubicación es viable y factible objetiva y técnicamente, pero no han tenido en cuenta la sensibilidad de la zona, ya que a estos técnicos no les han informado que en esa zona va un futuro corredor verde, y más ahora que se quitó la vaqueriza, y se puede rematar esa entrada a Fuente Palmera. Se trata de un proyecto de interés general, con valor patrimonial porque hay yacimientos cercanos y discurre la Cañada Real».
Según Alejandro B. Galán, la preocupación mayor se concentra en este edificio de bombeo y es múltiple por parte de vecinos y afectados de Fuente Palmera no sólo porque la incorporación a la EBAR vaya pegada a tan sólo 3 metros de la circunvalación que acompaña todo el margen del arroyo ubicándose muy cercana de algunos puntos sensibles del municipio como el Centro de Salud que cae a unos 200 metros de allí, también hay preocupación por ser un posible punto de concentración de accidentes de tráfico al realizarse una incorporación directa de vehículos pesados a dicha carretera, no habiendo espacio para carriles de aceleración/desaceleración.
A parte de eso, prosigue Alejandro, existen otros motivos de preocupación ambiental, por el impacto visual – paisajístico que supone la colocación de ese edificio industrial en una explanada de hormigón armado de más de seiscientos metros cuadrados para que maniobren los camiones que retiran la basura procedente de las redes fecales, a parte del desmonte con escollera necesario que hay que hacer en esos terrenos para realizar dicha losa de hormigón y el recinto cubierto donde irá el bombeo y demás sistemas.
El edificio de la EBAR, que dentro del presupuesto base de licitación global supone un coste de unos 576.000 euros, también va provisto de un gran grupo electrógeno de gasoil para garantizar el bombeo durante los cortes del suministro eléctrico.
Lo que Galán les trasladó a los técnicos en caso de que la EBAR vaya definitivamente es el sitio proyectado, es que se comprometan a garantizar:
– Un estricto control y mantenimiento de la instalación para evitar escape de olores, con un eficaz sistema de desodorización.
– Retranquear el vallado frontal de ese acceso rodado de vehículos pesados a la instalación al menos 8-10 metros para mejorar algo la visibilidad al tráfico.
– La integración del edificio en el entorno. Crear un perímetro de vegetación de ribera, sustituir la cubierta inclinada por una ecológica que no necesita mantenimiento y hacer compatible dicha EBAR con el futuro Corredor Verde que lleva proponiéndose para esa zona desde el año 2004.
Alejandro B. Galán también les planteó una alternativa para poder eliminar esa instalación de bombeo «que podría ser innecesaria y que el equipo redactor del proyecto comprobará durante los próximos meses cuando se le traslade la alegación que la describa». La idea consiste en realizar igualmente una reagrupación de vertidos mediante un colector general que discurre de manera estratégica por zonas que no implicarán la paralización del pueblo ni tampoco cortes de calles y resolver o aliviar los problemas de sobrepresión que sufren las redes de saneamiento de la parte baja del núcleo urbano cada vez que llueve de forma abundante, sobre todo en calle La Fuente y alrededores. La reagrupación se hace a lo largo de un recorrido extenso que permite que el colector vaya adquiriendo mayor diámetro conforme más puntos vaya incluyendo en su recorrido. Finalmente se reagrupan todos los vertidos y se conducen hasta la EDAR por gravedad a lo largo de un recorrido fuera de zonas inundables y siendo necesario compatibilizar el trazado propuesto de dicho colector con el sector urbanizable SUS-01 recientemente iniciado a trámite. La idea sería aprovechar que aún está sujeto a modificaciones para que ambas actuaciones que son de interés general para el municipio sean compatibles y no antagónicas sin que una perjudique a la otra.
Esta última opción conllevaría un ahorro para las arcas municipales de 21.000 euros anuales en mantenimiento, además de los más de 500.000 euros del coste del edificio de la EBAR.
Todo esto se va a presentar, a priori, por parte de los afectados como alegación durante el período de alegaciones, el cual culminará treinta días hábiles después de que se realice la última publicación en prensa. Se calcula que tendrán todavía todo el mes de agosto para ello.
En este sentido, los técnicos de la Junta de Andalucía se han comprometido, como no podía ser de otra manera, a estudiar todas las alegaciones y responderlas. Además de las que puedan presentar los vecinos afectados, el grupo municipal del PSOE va a presentar otra que consiste en trasladar la EBAR al otro lado de la carretera, tal como señaló en la reunión su portavoz, Antonio Javier Guisado. En calidad de vecino y representante del PP, Antonio Adame afirmó con rotundidad que «el pueblo no quiere estación de bombeo» y planteó una alternativa de conectar los colectores que discurren por Fuente Palmera.
Por su parte, el Ayuntamiento de Fuente Palmera ya tiene preparadas sus propias alegaciones bajo tres criterios: la posible modificación de la EBAR situándola al otro lado del arroyo, ver las posibles alternativas a que no haya EBAR y que informen al Consistorio sobre el impacto ambiental de la depuradora.
Lo que sí está claro para el alcalde, Francisco Javier Ruiz, es que en caso de que haya EBAR, el mantenimiento lo va a llevar EMPROACSA porque existe un convenio con esta empresa pública de la Diputación de Córdoba, «que realiza una buena gestión, la cual no hacen en eficiencia en base a reducción de gastos, sino una gestión integral de todo el mantenimiento. En la provincia de Córdoba, Emproacsa es responsable del mantenimiento de 55 estaciones de bombeo, que no es poco, y además ellos mismos han dicho en la reunión que en otros pueblos colindantes como Almodóvar, la EBAR se va a ubicar al lado de la piscina pública, y en Posadas, en zonas totalmente urbanas como la Fuente de Los Lavaderos y el Paseo, lo que nos hace entrever que el mantenimiento tendrá que ser bastante eficaz».
PROYECTO
En el año 2003 se empezó a estudiar el tema, surgiendo en 2004 un PLIEGO de BASES TÉCNICAS de LA E.D.A.R. de FUENTE PALMERA (CÓRDOBA) donde ya se detallaba su ubicación (prácticamente un poco más debajo del camino de Riegos La Colonia donde va actualmente propuesta, más pegada al arroyo de La Plata). Este primer documento técnico presentaba una alternativa de llevar la red general por el margen derecho del arroyo de la Plata, con un presupuesto base de licitación de unos 2,24 millones de euros.
El nuevo proyecto actualmente en periodo de alegaciones es mucho más completo y con un nivel de definición mayor. Fue redactado a finales de 2015 y consiste en hacer una reagrupación de vertidos en la parte más baja del núcleo urbano para pretratar esas aguas en una Estación de Bombeo (EBAR) y hacerlas aptas para ser impulsadas hasta la estación depuradora (EDAR) que se ubica justo en el camino donde comienza el T.M de Hornachuelos (Camino de Riegos La Colonia). El presupuesto base de licitación para acometer todas las obras rondará 5,83 millones de euros.
La parte del proyecto donde se ve implicada la reagrupación de vertidos con EBAR y su conducción hasta la EDAR implica una inversión de 1,44 millones de euros.
