La decena de componentes del Consejo participantes en el acto han estado acompañados por el alcalde de La Colonia, Francisco Javier Ruiz, la concejala de Infancia, Laura Sánchez, el concejal de Cultura, Quique González, el concejal de Agricultura, Javi Sánchez, la técnica municipal de Infancia, María José de la Rosa, y la educadora social, Pepi Moyano.
Fue en 1989 cuando se aprobó el texto final de la Convención sobre los derechos del Niño y la Niña, la cual se convirtió en ley un año después en 20 países, entre ellos España, que desde entonces defiende, respeta y divulga los derechos de la infancia.
En este Día Mundial de la Infancia es importante poner en valor los grandes logros a favor de los derechos de los niños y las niñas, así como el poder transformador de involucrarlos de manera directa en la construcción de un mundo mejor para ellos, y con ello, para todos.
Desde la corporación local señalan que no son ajenos a esta realidad. Por ello, se comprometen con la promoción de una mayor y más eficiente inversión en la infancia, garantizando que se asignan los recursos necesarios para avanzar en la consecución de una serie de objetivos.
Cada niño, niña y adolescente es valorado, respetado y tratado justamente, haciendo de las entidades locales espacios socialmente inclusivos, que permitan impulsar las capacidades de niños, niñas y adolescentes, que luchen contra la discriminación y que les ofrezcan una oportunidad para alcanzar todo su potencial.
Las voces, necesidades y prioridades de cada niño, niña y adolescente se tienen en cuenta en todas las decisiones que les afectan, incorporando la participación infantil y adolescente con carácter estratégico en la elaboración, seguimiento y evaluación de las políticas locales de infancia y adolescencia.
Todos los niños, niñas y adolescentes tienen acceso a servicios esenciales de calidad. Impulsando medidas y dedicando recursos específicamente dirigidos a la población infantil y adolescente en el ámbito local, con un enfoque preventivo y universal en el diseño de las prestaciones y servicios sociales para combatir la pobreza infantil.
Creando entornos protectores con recursos y capacidades suficientes para garantizar, desde un enfoque preventivo y en coordinación con los distintos ámbitos, la protección de niños, niñas y adolescentes ante situaciones de riesgo y violencia. E impulsando un medio ambiente sano para la infancia.
Y por último, impulsar y promover los derechos de los niños, niñas y adolescentes a nivel global, especialmente en situaciones de emergencia.