Así, el cortejo atravesó parte del Bulevar, siguiendo por las calles Barcelona, Portales, Santos, La Fuente, Higuera, Carretera Palma del Río, Segovia y Merceditas, Garrigues Walker, Blas Infante, Posadas, y de nuevo calle Portales para culminar en la Plaza Real. A paso más bien ligero, ya que este año se alargaba la fiesta con el espectáculo infantil en la plaza, los Reyes Magos arrojaron 720 kilos de caramelos, 350 kilos de gominolas, 5 cajas de pica pica, 2.000 esponjitas, 10 bolsas de pastillitas, 3.000 chocolatinas, 500 bolsas de conguitos, 1.000 aspitos y 500 balones. En el suministro de caramelos colaboraron las entidades bancarias Cajasur, Unicaja, BBVA y La Caixa, aparte de los 120 kilos que aportó la firma Magtel. La verdad es que el tema de los caramelos sigue siendo una pena en el sentido de la gran cantidad que se queda en el suelo desperdiciada, un derroche innecesario que podría evitarse con otras alternativas o simplemente reduciendo el número de kilos. Mención aparte para el Rey Baltasar, que como también parece mandar la tradición es el que más público atrae, porque es el que siempre va más cargado de caramelos, balones, etc. En esta ocasión vino acompañado de una campaña propagandística de una corriente religiosa con la que identificó lápices, monederos, pulseras, cds, libros de colorear,…
Cerrando la comitiva, como viene siendo habitual en los últimos años, la carroza de Eduocio, que en esta ocasión representaba a los personajes de la mítica serie Los Picapiedra y que mantuvo a su lado a gran cantidad de público hasta el final del recorrido.
Una vez en la Plaza, la novedad de este año fue un espectáculo infantil que precedió a la entrega de juguetes por parte de los Reyes Magos. La compañía Los Peque Músicos ofreció una entretenida obra llamada El Hada de la Música en busca de la Navidad perdida, que dejó boquiabiertos a los más pequeños logrando animar al público ante el gélido frío que empezaba a arreciar. Seguidamente, para completar las novedades de esta generosa edición de la cabalgata 2015, una pequeña sesión de fuegos artificiales y dos cañones de nieve artificial convirtieron la Plaza en un escenario idílico mientras Melchor, Gaspar y Baltasar recibían niñ@ por niñ@ para entregarles personalmente un pequeño juguete.
Señalar que en todos y cada uno de los núcleos de población tuvieron lugar cabalgatas.