La actividad estaba enmarcada en la amplia programación de la Semana del Mayor organizada por el colectivo colono, la cual culminó ayer domingo en su sede. Después de cuatro meses de ensayos el resultado fue grandioso. Tiene mucho mérito y es una alegría ver cómo personas sin experiencia en las tablas se aprenden un guión, lo interpretan a la perfección y no se amilanan por estar encima de un escenario ante más de cien espectadores.
Todo este trabajo se ha llevado a cabo a través de un taller municipal de teatro dirigido por Alfonso Gálvez, vecino de La Carlota con amplia experiencia y conocimientos en estas lides. La representación ha sido una obra adaptada de La zapatera prodigiosa, de Federico García Lorca, con algunos personajes nuevos y acortada algo en su contenido. La obra de teatro del autor granadino se estrenó el 24 de diciembre de 1930 en el Teatro Español de Madrid y trata sobre un matrimonio de conveniencia y la lucha de una mujer (la zapatera) entre su realidad y sus verdaderos deseos, lo que deja en evidencia cómo el ser humano se debate entre aquello que le presenta el destino y lo que él desea íntimamente desde lo más profundo de su alma.
El elenco de actores y actrices es el siguiente:
– Zapatera: Valle.
– Zapatero: Juan.
– Niño: Rafa.
– Alcalde: Trini
– Ayudantes del zapatero: Luisa y Adela.
– Vecinas: Carmen, Custodia y Maruja.
– Don Mirlo: Mary.
– Mozo del sombrero: Rufina.
– Presentador (Federico García Lorca): Jesús Pilo.
La zapatera prodigiosa trata de una mujer joven casada con su marido por conveniencia, por eso su actitud hacia el zapatero no es de ternura. Al principio habla de su marido con despecho y dice no estar enamorada de él, ya que el matrimonio lo decidieron terceras personas. La zapatera sueña amores imposibles.
En el pueblo, la gente habla mal de esta joven, sobre todo las vecinas, y por tanto La Zapatera tiene muy mala fama, le cantan coplas con desprecio, ella se siente sola y sólo tiene un gran cariño al Niño, que abre su actuación en la obra recibiendo el regalo de un muñequito.
El zapatero es infeliz, se casó con la zapatera a los cincuenta y tres años y no había tenido ninguna esposa antes, es un hombre bueno y pacífico, trata bien a su mujer aunque se deja llevar por la opinión de los demás y es bastante generoso con todo el mundo.
La obra cierra el primer acto con la noticia de la marcha del marido. El Niño habla con la zapatera y le cuenta que su marido se ha ido (por culpa de todo lo que dicen de ella en el pueblo.)
La zapatera tiene que salir adelante trabajando en la taberna. El alcalde del pueblo sigue malmetiendo y hablando con sorna de la zapatera . Este personaje ha estado casado cuatro veces y le echa piropos y proposiciones a la joven.
El niño es con la única persona del pueblo con quien se lleva bien la zapatera, como ella no puede tener hijos propios, le trata como si fuera hijo suyo y ambos se quieren.
Pasa el tiempo y un día aparece en el pueblo un titiritero contando historias y entreteniendo a las gentes. Este personaje es el marido disfrazado que al hablar con la zapatera se da cuenta de que le quiere y le echa de menos.
Mientras tanto en la plaza del pueblo se pelean dos hombres y todas las vecinas dicen que es por culpa de la zapatera. Estos Mozos quedan heridos por una navaja y todas las voces acusan a la mujer del zapatero de la grave pelea.
El zapatero haciéndose pasar por titiritero extranjero, descubre lo mucho que quiere a su mujer y le pide perdón por haberla abandonado. Al final el matrimonio se declara abiertamente su amor y el autor acaba la obra con un cantar de coplas y el repicar de las campanas.