Los más pequeños también han sido partícipes con un taller de manualidades que tuvo lugar el lunes en la Biblioteca Pública, en el cual han elaborado un árbol donde las hojas de las ramas son siluetas de manos con mensajes en contra de la violencia de género. Algunas de esas frases son: «Todos tenemos una herida marcada cuando una mujer es maltratada»; «Mira por sus ojos y verás su sufrimiento»; «El amor se gana con esfuerzo, no se impone por la fuerza»; «La violencia es el miedo a los ideales de los demás», etc.
Por otra parte, en esta jornada de miércoles se celebran en el campo de fútbol varias actividades dinámicas y juegos de sensibilización desde las 4 a las 6 de la tarde. Y en el Centro Guadalinfo, también hoy, se proyecta un documental en dos sesiones, a las 6 para l@s niñ@s y a las 7 para los adultos. Además, el próximo sábado, vecin@s y socias del colectivo de mujeres asistirán a la manifestación convocada en Córdoba.
El acto central de este martes 21 lo abrió la alcaldesa de Ochavillo del Río, Aroa Moro, acompañada por la vicepresidenta de la Asociación de Mujeres Josefa Alegre, Pilar Mansilla. A continuación, tuvo lugar la conferencia a cargo de Dulcenombre Rodríguez, presidenta de la Plataforma Cordobesa Contra la Violencia a las Mujeres, que resaltó la amplia participación de mujeres en el acto, «con lo que eso significa para un pueblo pequeño como es Ochavillo».
Dulcenombre dio algunos datos relevantes. En primer lugar, que hasta la fecha el número real de víctimas mortales, no el oficial, es de 76, donde se incluyen 65 mujeres y 11 menores asesinados, púes estos ya se computan como violencia de género porque son asesinados para infligir daño a sus madres. Además, de ese número de mujeres, 20 tenían menos de 34 años, y el 66% de los asesinatos se han producido en municipios de menos de 1.500 habitantes.
Sobre los jóvenes, apuntó que «es muy importante hacerles llegar mensajes sobre la igualdad a través de otros recursos como pueden ser la poesía, el cine forum…porque los mensajes de la sociedad en general y de los medios de comunicación son muy tristes, como vemos en muchos anuncios donde se utiliza el cuerpo de las mujeres, etc., lo que significa una violencia simbólica impresionante. Esos mensajes no se pueden dar a la juventud». 
En cuanto al pacto de Estado contra la violencia de género señaló que, «además de que ya tenía que estar en marcha, no vale para nada si no se modifica inmediatamente la Ley de Hacienda Local, porque dicho pacto dice que se le da competencia a los ayuntamientos, pero si estos tienen las manos atadas en materia presupuestaria, no pueden hacer nada. En este sentido, como este año se van a prorrogar los Presupuestos Generales del Estado, exigimos que se haga una modificación de crédito para que desde el 1 de enero se ponga en marcha el pacto». 
En relación a las órdenes de alejamiento y su efectividad, Dulcenombre Rodríguez afirma que «hay mujeres que siguen adelante gracias a las órdenes porque tienen a una agente de la Policía Nacional en continúo contacto con ellas, las llaman constantemente y las visitan, y ante el peligro, las víctimas pueden llamarla rápidamente; igualmente, en casos de riesgo extremo las acompañan a cualquier parte. Lo que denunciamos desde la Plataforma es que desgraciadamente se están concediendo muy pocas órdenes de alejamiento, o lo que es lo mismo, se deniegan demasiadas desde los juzgados.
En definitiva, leyes tenemos, lo que hay que hacer es reivindicar que se cumplan».
Por último, lanzó un mensaje para que se aumente la información, la formación y la concienciación en las zonas rurales desde todos los niveles, es decir, desde las asociaciones de mujeres, los ayuntamientos y resto de administraciones, y más después de ese dato de que el 66% de los asesinatos han tenido lugar en localidades menores de 1.500 habitantes. «Hay que ir educando a la gente joven en otro concepto distinto al de ese amor romántico, de que somos mujeres libres, no somos propiedad de nadie… que el amor no es dolor y que no aguanten, que denuncien, que se puede salir de la violencia».
Retomando el acto, la coach Ana Blanco impartió un taller dinámico en igualdad de género, al que siguió la actuación flamenca de Rafael Guisado La K-abra al cante y Darío González a la guitarra, la cual se intercaló en su parte final con las «Poesías con alma» recitadas por las vecinas de Ochavillo, Mercedes Hilinger y Pilar Mansilla, y la responsable del Centro Guadalinfo, Rosario Lora, desde donde partió la iniciativa. Uno de estos poemas dice:
Más bien me gusta esperar, esperar el cambio, el encuentro, la armonía…
Esperar la canción, la mirada, la sonrisa…
Esperar el amanecer, el atardecer, el sueño…
Esperar el amor, al hijo, el beso…
No quiero esperar al miedo, la inseguridad, el desasosiego
No quiero esperar la noche, la oscuridad, el duelo
No quiero…
La clausura de la jornada tuvo lugar con la ofrenda floral y la luz de las velas en recuerdo de todas las víctimas mortales en lo que va de 2017, con la esperanza, como dijo la alcaldesa, de que al año que viene no haya que encender ni una sola vela.
Conclusiones
Para la alcaldesa, uno de los datos más significativos es que el 66% de las 76 víctimas asesinadas se ha producido en municipios de menos de 1.500 habitantes. Aroa Moro señala que uno de los problemas de esta lacra es que «las generaciones de jóvenes no están suficientemente educadas ni concienciadas, por lo que hace falta un trabajo de base, no sólo sobre las víctimas, sino sobre esas futuras generaciones en el ámbito de la educación con el objetivo de erradicar las conductas machistas que lamentablemente terminan en muchos casos en víctimas y agresores». Por otro lado, la alcaldesa ha resaltado que, a pesar de los recursos limitados de las entidades locales autónomas en materia de prevención contra la violencia de género, en Ochavillo del Río se llevan a cabo acciones que ayudan a la conciliación de la vida familiar con la laboral, como es el servicio de aula matinal, financiado al cien por cien por el Ayuntamiento de la ELA, y otras actividades como el Taller de Envejecimiento Activo que, entre otros objetivos, facilitan un respiro a muchas mujeres que tienen la tarea diaria de cuidar de sus familiares mayores, trabajo que en casi la totalidad de los casos recae en la mujer. En definitiva, Aroa Moro indica que «actos como el de hoy son necesarios desde el punto de vista de la concienciación, pero también hay que ejecutar medidas que realmente liberen un poco a la mujer de las cargas que tiene».
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