¿Sabían que hasta la Colonia llegan turistas de Nueva Zelanda, Madagascar o Groenlandia? ¿Vienen a ver Fuente Palmera? ¿Podría nuestra localidad ser algo más que un sitio para pernoctar y entrar en la oferta turística de estos visitantes?
Nuestra primera parada es en La Ventilla, en Casa Rural Ecuestre Carmen Martínez, donde su propietaria nos recibe y atiende amablemente. Aquí tenemos un caso único en la Colonia, donde se combina el alojamiento rural para huéspedes con el centro ecuestre, disponiendo de una oferta diferente para el visitante.
Carmen está totalmente convencida de que el turismo rural puede ser un nicho de mercado en nuestro municipio, “porque aunque la Colonia aún no tenga mucho que visitar, tenemos alrededores de primer nivel como Hornachuelos, Almodóvar del Río, Écija, Palma del Río… y capitales como Córdoba y Sevilla a muy poca distancia y con buenas comunicaciones”.
“Creo que tenemos que hacer fuerza en común para que la oferta turística local de Fuente Palmera crezca; a mí me viene mucha gente por la feria de la boda y ExpoFare, son dos eventos muy conocidos; pero todo lo demás es para pernoctar e irse fuera; lo máximo que hacen es preguntarme dónde pueden comer bien en el pueblo”.
“Pienso que debemos potenciar aquello a lo que pueda venir el turismo a la Colonia, organizar paquetes turísticos para promover y hacer más atractiva nuestra localidad en sí; no obstante, yo personalmente no me puedo quejar porque siempre tengo la casa llena”, afirma.
Carmen Martínez solo lleva con el negocio de la casa rural unos seis años. Desde el principio la afluencia de visitantes fue buena, lo cual se mantuvo de manera constante hasta la entrada de la pandemia. Después se fue recuperando paulatinamente, beneficiada asimismo por la explosión del turismo de naturaleza, alejado de las aglomeraciones.
En esos primeros años el visitante de Casa Rural Ecuestre Carmen Martínez ha sido mayoritariamente extranjero, pero ahora ya va entrando también el nacional a raíz de la pandemia, sobre todo de Madrid, Barcelona, Valencia… que por las restricciones no han podido viajar fuera de España.
Los perfiles son muy variopintos. “Aparte del turista tipo, hasta aquí vienen trabajadores, parejas que quieren despejarse un par de días, grupos de moteros que van recorriendo el país, personas de muy alto nivel económico, otras amantes de los animales, de los caballos, para que les dé clases de equitación… hasta una vez me llegó una familia en helicóptero, que aterrizó ahí en la pista de los caballos”.
Carmen tiene muchas anécdotas de todo este tiempo. En una ocasión acogió a un norteamericano de la ciudad de Chicago que buscaba asesoramiento para montar unas instalaciones ecuestres y una ganadería de pura raza. “Son experiencias únicas que nos la cambio por nada del mundo, porque además yo vivo aquí con ellos; además les gusta ese ambiente, quieren conocer tus costumbres; y cuando vienen familias con niños, es para quedarse aquí y disfrutar de los caballos”.
Por último, entre las curiosidades, Carmen tiene en uno de los pasillos de la vivienda un mapamundi donde los turistas marcan su país de procedencia. Pocos quedan ya por señalar. Por nombrar algunos de los más alejados, Australia, Groenlandia, Chile, Japón, Mongolia, Papúa Nueva Guinea, Canadá o Madagascar.
Hacienda de La Palma
El pionero en la Colonia en este sector es Francisco José Carrasco, propietario de Hacienda de La Palma, situada en el término de Cañada del Rabadán, a la altura del km. 15 de la carretera Écija-Fuente Palmera.
En su opinión, Fuente Palmera por su ubicación es un punto céntrico en Andalucía y por lo tanto estratégico, desde el cual se puede organizar un viaje turístico que además de los puntos de interés cercanos de la Colonia y alrededores, (que son muchos y muy interesantes), se pueden visitar también destinos turísticos muy importantes aunque estén un poco más lejos, como Córdoba, Sevilla, Málaga, etc.
“Entiendo que en la economía de la Colonia no vaya a ser una actividad de primera línea pero en cualquier caso todo suma, y aunque no se genere un gran volumen de ingresos de manera directa, el darnos a conocer resulta siempre importante en otros ámbitos”, apunta.
Francisco comenzó a recibir a los primeros huéspedes en octubre de 2008, después de renovar la casa. “Lo que empezó como una fórmula para poder mantener el edificio en valor, se convirtió en una ocupación habitual de muchos fines de semana y por lo tanto interesante también en lo económico”.
Su valoración de estos 13 años es totalmente positiva ya que ha sobrepasado las expectativas iniciales. “Además son muchas las satisfacciones personales que se tienen al conocer gente de tantos sitios. En estos años hemos hecho amigos de lugares muy diversos y lejanos”.
“Con respecto al nivel de ocupación, lógicamente al principio hay un periodo de crecimiento pero no demasiado largo. Después prácticamente se ha mantenido la misma ocupación durante todos los años, fines de semana y semanas completas los meses de verano”.
Respecto al perfil del visitante, nos comenta que los fines de semana lo que recibe generalmente son huéspedes de cerca, Córdoba o Sevilla. Es durante la primavera y el verano cuando llegan del extranjero.
“En este tiempo he podido observar que muchos de los extranjeros que eligen nuestro destino son de Francia y Bélgica. Algunos también de Holanda y menos de Alemania. Y como cosa curiosa ha habido visitas de sitios como Argentina, Nueva Zelanda, Estados Unidos y otros muchos que ni recuerdo”.
José Luis Adame
Por último, recabamos la opinión de José Luis Adame, responsable del Área de Desarrollo del Ayuntamiento de Fuente Palmera, que también está muy ligado a la asociación Turiscol en su labor de asesoramiento municipal.
Su respuesta a la pregunta que titula este artículo es un «sí rotundo”. Y sus reflexiones son las siguientes:
El turismo rural es algo que evidentemente no ha surgido recientemente y que lleva mucho tiempo entre nuestras formas de hacer turismo, pero el turismo de Sol y Playa tenía este sector totalmente acaparado, algo que nos hacía pensar que si no estábamos cerca de la costa, era difícil captar al público objetivo.
La potencialidad del turismo interior en sus diferentes versiones, ofreciendo vivencias, experiencias, cultura, naturaleza, gastronomía, aventura, actividades deportivas, nos permite disponer de una amplia oferta atractiva a consumidores de distintos perfiles y orígenes.
Por otro lado, abordando el nivel interno, podemos observar que Fuente Palmera a nivel turístico, ha iniciado su andadura recientemente, mientras que localidades de nuestro alrededor, hace mucho tiempo que iniciaron su actividad de la mano del turismo cinegético y de naturaleza.
No voy a poner el foco en la ventaja que nos puedan llevar otros destinos, o en lo que no se ha realizado previamente, sino en el desarrollo que en varios años el turismo de Fuente Palmera ha conseguido, a través de un grupo de personas que han formado una Asociación de Turismo, creando de esta forma un interlocutor válido, que combina las sinergias y ayudas en turismo proporcionadas por el Ayuntamiento de Fuente Palmera.
En La Colonia de Fuente Palmera hay Casas Rurales (con dilatada experiencia en el sector) y Viviendas Turísticas de Alojamiento Rural (VTAR) de reciente creación, que desde el primer momento han tenido la confianza y han creído en el poder de atracción del entorno que nos rodea, hacia los potenciales clientes.
La fortaleza de Fuente Palmera, radica en ofrecer toda la potencialidad que ofrece por un lado «El Valle del Guadalquivir» haciendo nuestros, recursos del entorno como Castillo de Almodóvar, Parque Natural Sierra de Hornachuelos, Centro de Interpretación del Guadalquivir en Palma Del Río, sin olvidar el turismo de compras y eventos como la Feria de la Boda que nos ayudan a posicionar Fuente Palmera.
Por otro lado, la ubicación geográfica que nos permite apoyarnos en destinos turísticos conocidos internacionalmente, como la Mezquita y los Patios de Córdoba, la Giralda en Sevilla, la Alhambra de Granada, junto con toda la amplia oferta que estos iconos del turismo andaluz ofrecen.
Viendo la procedencia de los visitantes de nuestros alojamientos, nos hace levantar la mirada y poner nuestros ojos en el público internacional, ofreciéndole nuestras particularidades que nos hacen únicos además de la amplia y variada oferta que nos rodea.
Volviendo a la pregunta inicial, considero que si somos capaces de aumentar la oferta, implicando a otros sectores como por ejemplo el gastronómico, que nos permitan complementar y mejorar nuestro destino, el aumento de las visitas nos permitirá confirmar el nicho de mercado y la aportación al PIB de Fuente Palmera, así como la fijación de la población en núcleos desfavorecidos de La Colonia, debido a que estos tienen una gran potencialidad para ser emisores de oferta, a través de la puesta en marcha de nuevas casas rurales y de esta forma confirmar un nuevo modelo de negocio para La Colonia de Fuente Palmera.