La imagen de San Isidro Labrador pudo por fin salir de su iglesia, aunque solo fueran unos metros, hasta la Plaza Real de El Villar. Allí en la tarde del sábado tuvo lugar la ofrenda floral por parte de vecin@s y visitantes. Poco a poco se fue llenando de ramos y centros florales hasta que a las 7 comenzó la misa oficiada por el párroco, Carlos Sanz, y con la presencia de las autoridades municipales.
Este pequeño evento organizado por la Hermandad de San Isidro Labrador de El Villar ha sido muy bien acogido por l@s villareng@s, ya que el año pasado no pudo haber misa por las restricciones del estado de alarma y solo se hizo la ofrenda floral en el interior de la iglesia con mucha cautela.
En esta edición, el hecho de hacer la misa en la plaza posibilitaba la presencia de más público y eliminar así las limitaciones de aforo de la iglesia, que hubieran dejado a la mayoría de l@s fieles en la calle. Tampoco es que hubiera una muchedumbre ni la gente se apelotonó; unos se sentaron en la sillas puestas en mitad de la plaza y otros se quedaron alrededor de esta y en la calle de la iglesia. La Hermandad repartió algunas mascarillas y hubo presencia de Policía Local y Protección Civil.
Reseñar la asistencia de componentes del Coro y Hermandad de Romeros de Cañada del Rabadán, que hicieron su ofrenda, lanzaron vivas en honor a San Isidro y cantaron al finalizar la misa.
Al año que viene tod@s esperan hacer el camino y celebrar la romería de manera normal. El hermano mayor de la Hermandad de El Villar, Antonio Osuna, comentaba que «l@s villarengos están contentos de que lo hayamos hecho así este año, con responsabilidad y prudencia; en cuanto acabe la misa llevaremos a San Isidro a la iglesia y mañana domingo seguirá la ofrenda para quien lo desee o no haya podido venir hoy».