Por cuarto año consecutivo, el Área de Cultura del Ayuntamiento colono y la Asociación El Diablo Cojuelo (Écija-El Villar) organizan un certamen que se ha ganado el reconocimiento y el calor del público local. El puente de la Constitución y la Inmaculada ya se asocia con los títeres en Fuente Palmera y las familias esperan la celebración de un evento que en cada edición dibuja una amplia sonrisa en los cientos de niñ@s -y no tan niñ@s- que asisten a sus representaciones.
En el acto de presentación de TitiriColonia han participado el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Fuente Palmera, Quique González, y el director artístico del festival, José Diego Ramírez, perteneciente a la compañía A la Sombrita, entidad que colabora con la organización. La cuarta edición de la muestra viene marcada porque las tres compañías que actúan coincidirán en la representación de cuentos tradicionales y porque utilizan el títere de guante para escenificar la obra, aunque cada una con sus particularidades. El hecho de que el público, y sobre todo los niñ@s, conozcan o les suenen estos cuentos supone una baza a favor para que disfruten más del espectáculo.
El festival lo abre el domingo 4 a las cinco de la tarde la compañía jerezana TEJ Producciones, la cual ofrecerá una versión muy peculiar de El Sastrecillo Valiente. Al frente de ella se encuentra un profesor de teatro que se ha introducido en el sector de los títeres y que presenta una escenografía atípica con elementos como una pantalla de 42 pulgadas.
El lunes 5 a la misma hora llegará una versión «muy alocada y gamberra» de Caperucita Roja de la mano de la compañía madrileña Tropos Teatro. En esta ocasión, el titiritero es un actor, dramaturgo, cuentacuentos… que manipula muy bien los títeres.
Y el martes 6, también a las cinco de la tarde, se cierra la muestra con el toque internacional de la compañía argentina El Retablo de la Ventana, afincada ahora en Madrid y con una trayectoria de más de 30 años. En la actualidad trabajan con 16 espectáculos diferentes y a Fuente Palmera traen una versión de El Gato con Botas.
Para José Diego Ramírez, TitiriColonia 2016 garantiza la diversión y supone una continuidad de las tres ediciones anteriores, aunque con la coincidencia de que «vamos a ver tres versiones de teatro de títeres de guante, pero muy diferentes en su forma de escenificarlas». Por otra parte, el director artístico del festival ha agradecido a Emilio J. Domínguez, responsable del Centro Guadalinfo de Fuente Palmera, «el pedazo de cartel que ha confeccionado y que me tiene todavía intrigado porque a ver de dónde ha sacado la marioneta de Carlos III, que sentado sobre la bola del mundo no podía ser más significativa». Como ha añadido el concejal de Cultura, se trata de «un guiño al 250 aniversario de La Colonia», una imagen cargada de simbología con el histórico monarca dominando el mundo.
Asimismo, Ramírez ha agradecido «el esfuerzo del Ayuntamiento de Fuente Palmera por mantener este festival», sobre todo porque está financiado al cien por cien por el Consistorio colono. Sobre este asunto, Quique González explicó que por un error administrativo al presentar el proyecto a la Diputación Provincial, ésta no le ha concedido la subvención solicitada. En opinión del director artístico del festival, el hecho de que ayuntamientos como el de Fuente Palmera apoyen este tipo de eventos es algo «de ciencia ficción ya que la mayoría de los programas están desapareciendo; los teatros están sobreviviendo por la taquilla de la gente que sale por televisión y las instituciones están apostando por el entretenimiento, no por la cultura; estamos otra vez al pan y circo de los romanos, lo cual es una barbaridad que se está llevando por delante al sector de los titiriteros, que está en peligro de extinción».
TitiriColonia se presenta un año más como un espectáculo para toda la familia. Aunque la temática sea infantil los titiriteros ofrecen numerosos guiños al adulto. «No queremos que los padres sienten a sus hijos en las sillas y se vayan atrás a hablar de sus cosas, sino que se sienten a su lado y disfruten con la sonrisa de los pequeños, que interactúen con sus hijos porque estos les preguntaran cosas sobre la obra». Uno de los objetivos, prosigue Ramírez, «es intentar remover de cierta manera las conciencias de los niños, apartarlos de estas supertecnologías que hay ahora, volver a los códigos del juego y que los padres vivan una experiencia con sus hijos; creemos que todavía hoy en el siglo XXI merece la pena ofrecer estas experiencias».
El festival de títeres se publicitará especialmente en los próximos días en todos los centros escolares de La Colonia. Se van a hacer 250 carteles y 5.000 octavillas, además de la difusión que se hará por Internet y las redes sociales. Las previsiones son positivas no sólo por la respuesta habitual del público colono, sino porque también el puente festivo invita a la llegada de visitantes de la comarca e incluso de otras provincias, ya que muchos espectáculos de títeres tienen sus propios seguidores y fans.
