La jornada de clausura estuvo marcada por el acto institucional donde participaron la delegada de Educación, Esther Ruiz Córdoba, y el alcalde de La Colonia de Fuente Palmera, Francisco Javier Ruiz Moro. También estuvieron presentes la concejala de Educación, Marta Montenegro, el concejal de Participación Ciudadana y Cultura, Quique González, el alcalde pedáneo de El Villar, Salvador Fernández, la Jefa de Inspección de la zona, Juana Bolancé, la red de directores de centros escolares de La Colonia, el equipo de profesores de orientación, representantes del AMPA ‘Aviet’ y del Claustro del colegio, y por supuesto, el alumnado y todos los maestros del centro, encabezados por su director, Francisco Jesús Gracia, que condujo un acto perfectamente estructurado.
Previamente tuvo lugar una degustación de postres caseros elaborados por familias del centro, con tarta incluida del XX aniversario. A la llegada de Esther Ruiz, se realizó una visita por las dependencias del colegio en la que el director fue explicando su distribución, que destaca por su amplitud, una biblioteca con más de 3.200 libros y unos pasillos que llevan el nombre de calle de la Paz, de la Igualdad y del Medio Ambiente, valores que se trabajan de forma concienzuda en el centro. Este también dispone de un bosquecillo donde hay plantadas diversas especies que se cuidan con mucho mimo y que disfrutan de hasta riego por goteo. Como señaló el director, «la conciencia ecológica se fomenta diariamente entre toda la comunidad educativa en cuanto al reciclaje y la conservación de la flora». De hecho, recalcó que cuando l@s alumn@s salen de 6º de Primaria lo hacen con una conciencia ecológica y con unos valores individuales «con el objetivo de que sean buenas personas, además de los contenidos académicos correspondientes». Asimismo, la comitiva se emocionó con el visionado de un vídeo dedicado a las madres con motivo del 8 de marzo y en el que los protagonistas fueron l@s alumn@s con frases y mensajes llenos de ternura y amor hacia sus mamás.
Francisco Jesús Gracia abrió el acto de clausura con varios datos históricos. En 1992 hubo una reivindicación porque el colegio sólo acogía en aquel entonces a alumn@s de entre 4 y 9 años. En 1994 se produjo una marcha a Sevilla para pedir la ampliación del centro. Y en 1996 empezó la obra. Las nuevas instalaciones comenzaron a funcionar oficiosamente en la Navidad de ese año, inaugurándose las mismas el 10 de marzo de 1997. El director también apuntó que el Colegio San Isidro Labrador fue pionero al ser el primer centro TIC de la provincia de Córdoba.
Para Gracia, el centro se sustenta en cuatro pilares: el claustro, el AMPA, las familias y el equipo directivo. «Somos un centro humilde pero rico en valores, y estoy muy orgulloso de ser el director del mismo porque tenemos una gran comunidad educativa, donde vamos codo a codo con las familias en una misma dirección, lo cual repercute en el núcleo y en los resultados académicos del alumnado». En este sentido, afirmó que las escuelas rurales son la llave para que las aldeas no desaparezcan, «por lo que todos tenemos que hacer una reflexión y hacerlas pervivir».
A continuación, las alumnas Rocío y Sofía explicaron la confección del mural del XX aniversario, en el que aparecen las mascotas de la biblioteca y del medio ambiente. Seguidamente, l@s alumn@s Rocío Reyes, Cristian Pedraza y Rocío Franco recitaron unos poemas y se entregaron los premios de un concurso de relato corto y poesía. Respecto a lo relatos, los ganadores fueron Daniel Cobos, de Primer Ciclo; Sofía Moyano, de Segundo Ciclo; y Rocío Pavón, de Tercer Ciclo. En el certamen de poesía resultó ganador Yeray Guerrero.
Homenaje al profesor Salvador Bustamante
Sin duda, el momento más emotivo de la clausura fue el merecido homenaje – y sorpresa al mismo tiempo- que se brindó al profesor Salvador Bustamente Nogueras por sus 25 años de docencia en el centro, al que llegó antes de la citada reforma de las instalaciones. El director destacó su honestidad, humildad, capacidad de trabajo y saber estar, «un compañero, un amigo y un segundo padre para mí, por lo que en el día de hoy no nos podíamos olvidar de él». Salvador Bustamante recibió una placa conmemorativa de manos de María del Valle, presidenta del AMPA, y, lo más singular y trascendente, la noticia de que la biblioteca del centro, y en consecuencia de El Villar, llevará su nombre a partir de ahora. El director le entregó el rótulo que lucirá en la entrada de la misma.
Salvador Bustamante, al que la comunidad educativa de El Villar lo valora no solamente por su labor docente, sino también por la social en el núcleo, indicó que se siente muy orgulloso de cumplir en el colegio 25 años y espera que este siga en la línea que inició en 1992.
Presentación del escudo del centro
Antes de la intervención de los representantes políticos, tuvo lugar otro acto destacado como fue la presentación del escudo del centro. Hasta ahora, el colegio carecía de escudo y «se merecía tenerlo ya», señaló Francisco Jesús Gracia, que como director lo ha confeccionado y se lo ha regalado. El emblema, cargado de simbología, muestra los cinco arcos de la portada de la escuela, un libro abierto de color amarillo (el color de las AMPAs) y unos pinos con la copa en forma de corazones.
Por último, tomaron la palabra el alcalde de Fuente Palmera y la delegada de Educación de la Junta de Andalucía en Córdoba. Francisco Javier Ruiz se mostró de acuerdo en la reflexión que hay que hacer de la importancia que tienen los centros rurales, que en el caso de El Villar «supone un activo para el núcleo de población. Tenemos que apostar por los centros rurales, un ejemplo de enseñanza personalizada facilitada porque las aulas no están masificadas y hay una perfecta implicación de toda la comunidad educativa. Esto choca con las clases masificadas como, por ejemplo, tenemos en el colegio García Lorca de Fuente Palmera, con clases de 28 alumn@s, por lo que en algo nos estamos equivocando desde la Junta de Andalucía y desde el Estado».
Por su parte, Esther Ruiz, que sabe de primera mano lo que es un colegio rural por su etapa como maestra en Fuente Obejuna, un municipio también con núcleos de población, resaltó «el esfuerzo que los docentes destinados en esta red de centros rurales realizan cada día, itinerando entre aldeas para llevar la educación a todos los rincones de la provincia, dando las mismas oportunidades a todos los niños y niñas, independientemente del lugar en el que viven». Sobre el CEIP San Isidro Labrador destacó su «defensa de los valores de nuestra tierra y la unión clave de las familias y del equipo directivo, que lo hacen un centro referente para Andalucía de la educación pública y de calidad».
El colegio de El Villar tiene actualmente 40 alumnos distribuidos en cuatro unidades: una de Infantil con 11 alumn@s de 3, 4 y 5 años; una de 1º y 2º de Primaria con 11 alumn@s; una de 3º y 4º con 8 alumn@s; y una de 5º y 6º con 10 alumn@s. Las expectativas son bastante buenas porque se están superando las matriculaciones previstas de nuevos alumn@s de 3 años, ya que a día de hoy van ya 7 solicitudes de admisión, por lo que está muy cerca de que en el curso que viene haya dos unidades de Infantil. Écija y Fuente Palmera son las localidades que aportan alumnado, aparte de El Villar.
Resto de actividades
La conmemoración del vigésimo aniversario se ha desarrollado durante toda la semana con diversas actividades. El lunes tuvo lugar un perol de convivencia para toda la comunidad educativa, el visionado del vídeo dedicado a las madres y la lectura de poemas y relatos del concurso con motivo del 8 de marzo. El martes visitó el centro el cronista oficial de Fuente Palmera, Francisco Tubío, que deleitó y enriqueció a todos con una conferencia sobre los orígenes de La Colonia y de El Villar, con el tema de las 30 suertes que se repartieron -y de qué forma-, en el núcleo villarengo. Tubío regaló uno de sus libros al colegio, así como el Ayuntamiento, al que el director agradece especialmente su colaboración y participación con el evento. En la jornada del miércoles se celebró el «Día de la fruta de invierno» y el jueves hubo un espectáculo de magia y la representación del sainete sobre la fundación de La Colonia de la Asociación de Mayores San Isidro Labrador de Fuente Palmera.