Porque en los tiempos que corren nos hacen falta sonrisas y momentos de alegría, sobre todo entre l@s niñ@s. La jornada comenzó por la mañana con la proyección de la película a través de un link en el Facebook “Juventud y Deporte Ochavillo del Río”.
Y sobre las 5 de la tarde partió la comitiva desde el Ayuntamiento, con la alcaldesa Aroa Moro y el concejal Antonio Díaz dirigiendo el recorrido. Una furgoneta decorada al estilo de la película, con altar incluido y música mexicana guiaba a los personajes Mamá Imelda, Mamá Coco, Miguel y Héctor.
A la plaza ya se acercaron algunos peques, muchos disfrazados, acompañados de sus familias. Y seguidamente se inició el itinerario. Algunos se mostraron más reticentes e incluso soltaron alguna lágrima, pero la mayoría finalmente accedían a hacerse la foto los personajes, que siendo honestos es normal que den un poco de miedo a los más pequeños. Estos les entregaban bien un cuenco o una calabaza con golosinas, dependiendo de la edad.
Además, el Ayuntamiento ha establecido un concurso de disfraces mediante las fotos realizadas a l@s niñ@s disfrazados junto a los personajes y en los próximos días dará a conocer a los premiados.
Aunque es una fiesta que se viene celebrando en Ochavillo con más vistosidad en los últimos años, no es un evento que se quiera impulsar específicamente desde la ELA, “pero dadas las circunstancias y el año tan complicado que se está atravesando, pensamos en organizar una actividad diferente que generara ilusión entre los más pequeños”, señala la alcaldesa, Aroa Moro.
La jornada estaba ya diseñada antes de que se declarara el nuevo estado de alarma, el cual no ha variado su organización porque la idea era recorrer las calles visitando a l@s niñ@s en sus casas para evitar las aglomeraciones ni convocar a l@s vecin@s en ningún sitio. Lo único que se anuló fue el concurso para adultos, ya que pudiera haber complicado el cumplimiento de la restricción de seis personas como máximo reunidas.
Es una línea que ha seguido la ELA desde el inicio de la pandemia, “organizar actividades acogiéndonos a la normativa en cada momento sin ser los impulsores de ningún tipo de reunión pese a que l@s vecin@s puedan reunirse en sus casas o en el bar”, apunta Aroa Moro.
Otro ejemplo son los talleres que se van a retomar en breve, que van a ser en formato individual entregando el material alumno por alumno y buscando la manera de supervisarlos y evaluarlos individualmente. “Pese a que se podrían organizar en grupos pequeños, con las distancias y demás medidas, debido a la situación con cada vez más contagios, el tema de los asintomáticos y que somos un pueblo pequeño, decidimos hacerlos de esta manera y correr los menos riesgos posibles. Siempre me refiero a actividades organizadas por la ELA”.
Por último, Aroa Moro comentaba que si la evolución de la pandemia no remite, es muy posible que en el día de los Reyes Magos se tenga que hacer un recorrido similar al de Halloween, aunque con más ambición y mayores medios porque se trata del gran día de la ilusión para los más pequeños. No obstante, todo estará a expensas de las restricciones que haya en ese momento, pero Ochavillo del Río ya tiene más o menos pensado cómo sorprender nuevamente a sus vecin@s.
