Un autobús con agricultor@s colon@s, representantes de empresas, organizaciones agrarias y del Ayuntamiento, con el alcalde Francisco Javier Ruiz y la concejala de Hacienda, Sonia Rovira, partió esta mañana muy temprano rumbo a la capital de España para participar en la manifestación por la defensa del olivar, un sector que está pasando por momentos complicados, a lo que se une la amenaza de los aranceles abusivos de EEUU. 
Esta jornada y la expedición colona ha estado organizada por: Asociación de Empresarios, Cooperativa San Francisco de Borja, COAG Fuente Palmera, Agraria Roviper S.L., Olivas Gourmet y Ayuntamiento de Fuente Palmera.
Se estima que entre 20 y 30 mil personas han participado en la manifestación por las calles de Madrid, que ha partido de la Puerta de Alcalá y ha concluido en el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
Entre las reivindicaciones del sector olivarero se pueden destacar las siguientes: 
– Precios justos, que el aceite tenga un sistema regulador del mercado, para que cuando falte producto no se dispare el precio y cuando sobre no caiga desmesuradamente. Y cuando haya mayor producción se pueda retirar parte de ella del mercado para compensar el año en que sea corta y los precios no oscilen tanto.
– Una revisión completa del sistema de almacenamiento privado con una actualización inmediata de los precios de desencadenamiento que tenga en cuenta los costes de producción.
– El establecimiento de normas de autorregulación del mercado con carácter obligatorio en todo el sector.
– Que la PAC asegure el mantenimiento del olivar y el relevo generacional.
– Medidas de apoyo al olivar con mayores dificultades que garanticen el mantenimiento de la población rural.
– Perseguir las actuaciones que provocan la banalización del aceite de oliva y su utilización como producto reclamo, para lo que se pide promover un mejor conocimiento de las calidades del aceite de oliva por el consumidor y legislar de manera clara para que se evite la venta a pérdidas.
– Asegurar por las administraciones la trazabilidad y la calidad del producto ofrecida por los productores y preservar el prestigio del aceite de oliva español reconocido sobradamente por su alta calidad a nivel mundial.
A esta situación se ha unido el anuncio de Donald Trump de imponer aranceles al aceite y otros artículos españoles que pondrán en riesgo el mantenimiento de muchas explotaciones por falta de rentabilidad.
Por ello, piden también los manifestantes a la Unión Europea que diseñe una PAC que combata estas adversidades y asegure el mantenimiento del olivar y el relevo generacional. Asimismo reclaman que se combata legalmente el uso del aceite como producto reclamo y que se establezcan normas de etiquetado que garanticen al consumidor la certeza de la calidad del aceite que adquiere.
